Desde la madrugada del 1 de enero cientos de personas comenzaron a formar colas en ciudades del estado norteamericano de California para acceder a la marihuana recreativa legal que entró en vigencia el lunes.

Con la nueva legislación, cada persona mayor de 21 años podrá tener seis plantas en su casa y podrá comprar hasta 28 gramos por vez. En San Diego, Sacramento y Oakland, entre otros lugares, la venta legal comenzó el primer día del año. Los Ángeles y San Francisco por ahora deberán esperar a que se adapten algunas regulaciones locales.

 “¡Es legal!”, se podía leer en las remeras de los empleados de la tienda MedMen, en West Hollywood. Afuera una fila de más de una cuadra esperaba llevarse su planta. Mientras tanto, el dispensario Harborside de Oakland abrió a las 6 de la mañana del lunes y regaló camisetas con la leyenda "Flores para la Gente -- Cannabis para todos", según reportó el diario mexicano La Jornada.

En los Estados Unidos la venta de marihuana para uso recreativo es legal, además de en California, en Alaska, Colorado, Nevada, Oregón y Washington. En Maine también se puede llevar una dosis personal, aunque todavía no se autorizó completamente su venta, que se espera se inicie a mediados de este año, mientras que en Massachusetts será legal a partir de julio.

En California, el Grupo Operativo de Cannabis de Los Ángeles (Lactf) estima que se facturarán anualmente unos 7000 millones de dólares por todo el “rubro cannabis” ya en 2020.