Roger Federer debutó ayer en el ATP 500 de Rotterdam con un cómodo triunfo sobre el belga Ruben Bemelmans para quedar a dos victorias de regresar al número uno del mundo. El suizo, ganador de 20 títulos de Grand Slam, necesitó apenas 46 minutos para imponerse por 6-1 y 6-2, y ahora chocará por los octavos de final con el alemán Philipp Kohlschreiber, que el martes derrotó al ruso Karen Khachanov. Federer necesita alcanzar al menos las semifinales para desplazar de la cima al español Rafael Nadal y convertirse a sus 36 años en el número uno más veterano de la historia.