Al menos 24 de los 25 heridos durante el Superclásico, que habían sido atendidos en el Hospital Pirovano, fueron dados de alta ayer, en tanto un joven de 18 años que sufrió un paro cardiorrespiratorio fue derivado a una clínica.

La mayoría de los heridos se produjo sobre la mitad del segundo tiempo, cuando Rodrigo Mora convirtió el segundo gol de River y barras de Boca atacaron a personal de seguridad de la empresa privada Tech. Siete trabajadores de esa empresa fueron derivados al Pirovano, al igual que la mayoría de los heridos, con politraumatismos y escoriaciones.

El Ministerio de Seguridad ordenó a la Policía Federal identificar a los barras de Boca que atacaron al personal de la empresa, que a su vez son socios del club de la Ribera, para presentar una denuncia penal.

Además, la Justicia penal, contravencional y de faltas de la ciudad de Buenos Aires inició una causa por daños contra los integrantes de la barra brava de Boca por los incidentes que produjeron ayer cuando se trasladaban al estadio de River para presenciar el partido. También se inició otra causa contra hinchas de River por el ingreso a la tribuna local de pirotecnia y artefactos explosivos.

Uno de los gerentes de la empresa Tech Security, siete de cuyos agentes fueron atacados por los barras boquenses y debieron ser atendidos en el Hospital Pirovano, cuestionó el “protocolo” de la organización del operativo dispuesto por el Ministerio de Seguridad. “Lo que sucedió es parte del nuevo protocolo de seguridad, que hace participar a seguridad privada haciéndolos correr un riesgo mucho más alto porque tienen que meterse entre las barras para facilitar el desalojo al término del partido”, sostuvo Pablo Vázquez, gerente de la empresa.

La defensora adjunta porteña Graciela Muñiz afirmó que la AFA y los organismos de seguridad “no saben organizar un partido de fútbol” y pidió “que el Estado contrate especialistas internacionales sobre seguridad deportiva”.