DEPORTES › JOSE ACASUSO LE GANO A FERRER Y TAMBIEN ES SEMIFINALISTA

El Mago despertó del sueño a Mónaco

Coria superó a la revelación del certamen y definirá el pasaje a la final con Gasquet. Acasuso definirá la otra plaza con Moyá.

 Por Adrián De Benedictis

Una vez más, la máxima ovación fue para él. Como viene sucediendo en cada una de sus presentaciones, el máximo favorito del Abierto de Tenis de Buenos Aires, el argentino Guillermo Coria, se despidió de la cancha central de la Catedral de Palermo con todo el respaldo del público. El número cuatro del mundo había vencido 7-6 (10-8), 3-6, 6-1 al joven Juan Mónaco, la gran revelación del torneo, y de esa manera avanzó a las semifinales del certamen. En ese instancia, Coria se enfrentará hoy –desde las 14– a otro juvenil, el francés Richard Gasquet, de 17 años, que en el primer turno derrotó 6-3, 4-6, 7-5 al chileno Nicolás Massú. El que también accedió a esa instancia fue el misionero José Acasuso, que le ganó 7-5, 7-6 (7-5) al español David Ferrer. Su rival será el español Carlos Moyá, que en el último turno derrotó a Mariano Zabaleta por 4-6, 7-6 y 6-4.
Un poco más relajado, y dejando ver el hielo que permanecía sobre su muñeca izquierda, Coria fue contundente en la conferencia de prensa cuando afirmó: “Me muero por ganar este torneo, voy a jugar cómo sea”. Precisamente, esas palabras despejaron cualquier duda a partir de una caída en el set decisivo. Por ello, el chico de Rufino dijo que “en un momento pensé que no podía seguir jugando porque se me inflamó mucho”.
Cuando tuvo que analizar el partido (duró dos horas y 16 minutos), Coria dijo que “sabía que iba a ser difícil, él venía con confianza y muy suelto. No tenía nada que perder, entró muy sólido a la cancha. Yo creí que iba a comenzar con dudas y no fue así. Encima hacía mucho viento y no era fácil jugar. Por eso, cuando no te salen los golpes hay que correr”.
Como siempre, Coria agradeció “al público, que se portó muy bien y fue respetuoso con los dos. Sólo me molestó un poco cuando los amigos de él (por Mónaco) gritaban cuando no tenían que gritar”. Por último, Coria habló sobre el partido de hoy ante el francés: “Seguramente va a salir a jugar con todo, va a ser duro. Pero yo me siento bien físicamente, y hoy (ayer) me demostré que tengo mucho huevo”.
Coria comenzó el partido con mucho carácter, debido a que le quebró el primer saque a Mónaco luego de estar 40-0 abajo. En todo el parcial, la paridad fue constante, y ambos jugadores se ganaron el saque en varias oportunidades. De esa forma llegaron al seis iguales para definir en el tie break. Mónaco sacó ventaja para colocarse 5-1, pero Coria reaccionó para llegar al 6-6. El top ten erró una volea que hubiera sido el 8-6 final, pero luego pudo prevalecer para finalizar 10-8.
El segundo set mostró a un Mónaco más firme desde el fondo de la cancha, y buscando drops que complicaron mucho a Coria. Finalmente, el tandilense se llevó el parcial por 6-3. Coria mostró contundencia en el último set, a pesar del accidente en el tercer game, llegó al 6-1 final. Luego de jugar su primer torneo ATP, Mónaco dio muestras de que su carrera puede llegar muy lejos, y hasta convertirse en otro integrante de la legión.
Más tarde, Acasuso tuvo que sufrir para superar al español Ferrer. El encuentro fue muy luchado, y el misionero volvió a mostrar la misma irregularidad que en la noche del jueves. En el segundo set estaba 5-2 arriba, pero sus propios errores hicieron que tuviera que definirlo recién en el tie break. “Esto me hace acordar al 2001. Lo que estoy viviendo en esta semana es increíble”, dijo el misionero.

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La experiencia de Guillermo Coria pudo más que las ganas del pibe Juan Mónaco.
 
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