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Una igualdad con un gusto amargo

Vélez estuvo más cerca que Banfield, pero se tuvo que conformar con un empate que lo deja solo arriba, aunque hoy puede perder el liderazgo.

Vélez dejó pasar una buena ocasión para consolidarse como líder del Apertura al empatar 0-0 con Banfield. El conjunto de Alberto Fanesi estuvo mucho más cerca de la victoria, pero la buena labor del arquero Mariano Barbosa le impidió llevarse los tres puntos. Con este resultado, los de Liniers quedaron como únicos líderes, pero hoy pueden perder la punta con Newell’s o con Estudiantes y permitir que se les arrimen los restantes pretendientes al título.
Los dos tomaron el encuentro como una prueba decisiva. Es que Vélez llegaba de perder como local con Colón y no podía darse el lujo de otro tropiezo. Y Banfield venía en plena levantada y con ilusiones de prenderse en la pelea por el título. Así, en ese marco, la premisa de ambos fue clara: bajo ningún concepto se podía regalar algo. Entonces, no resultó difícil imaginar el desarrollo que se dio en la primera parte. Presión contra presión, pierna fuerte, pelota divida, imprecisiones y toda clase de jugadas típicas de un partido friccionado.
Para que el panorama fuese aún peor, un par de fallos polémicos terminaron de caldear el ambiente. Es que Vélez protestó un supuesto penal por una mano de Sanguinetti, mientras que los de Banfield tiraron la bronca por la roja exagerada que Pezzotta le mostró a Buján. Con un trámite disputado lejos de los arcos, se tornó lógico que casi no hubiera situaciones de peligro. La mejor fue una corrida de Palacio, que enganchó y sacó un derechazo que Sessa desvió a un costado. La otra fórmula de los de Falcioni era el juego aéreo, donde sus grandotes imponían su supremacía. Del otro lado, Vélez se sostenía en el ida y vuelta de Castromán, pero el volante estaba demasiado solo como para generar zozobra en el fondo de Banfield.
Con la diferencia numérica, la geografía del partido quedó clarita, con Vélez insistiendo en el ataque y con el local a la espera de algún contraataque salvador de Palacio. Pero como Pezzotta compensó rápido con la roja a Fuentes, todo volvió a ser como al principio. El único que intentaba algo diferente era Castromán, que con su cambio de ritmo y un poco de audacia armó dos buenas oportunidades, pero Barbosa le ganó el duelo en ambas ocasiones. A pesar de la salida del ex jugador de Lazio por un probable desgarro, Vélez siguió apretando y contó con las mejores chances. Sin embargo, siempre surgió Barbosa para ahogar el grito de los de Liniers.

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Buján forcejea con Gutiérrez, una muestra de lo que fue el juego.
 
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