DEPORTES › ESTA TARDE, CONTRA MEXICO, POR LOS OCTAVOS DE FINAL, EN LEIPZIG

El Mundial sin red arranca hoy para la Selección Argentina

Larga la etapa decisiva de la Copa del Mundo, sin término medio: el triunfo o el retorno. Pekerman pondrá el mismo equipo del debut y, si al cabo de los 90 minutos persiste la igualdad, habrá alargue de 30. Luego, si nada cambia, penales.

 Por Juan Jose Panno
Desde Leipzig

Cuando se hizo el sorteo, en medio de las marchas fúnebres que sonaban por haber quedado en un grupo mortífero se mezclaron también tenues voces de consuelo: “Después de todo, si pasamos podría tocarnos jugar con México o Portugal”. Y aquí estamos, con el equipo clasificado y con el partido de los octavos de final encima. Será hoy, a las 16 (las 21 En Alemania) en el estadio de Leipzig: Argentina-México.

El gran favorito para pasar los cuartos es Argentina, un dato objetivo más allá de los deseos, que tiene, sin embargo, connotaciones peligrosas porque ya todos sabemos muy bien qué pasó en el 2002 cuando el equipo de Bielsa era el candidato de la cátedra. El favoritimo surge esencialmente de la comparación de lo que produjeron hasta aquí en el campeonato. Argentina venció 2-1 a Costa de Marfil, goleó en una inolvidable exhibición a Serbia y Montenegro 6-0 y, ya clasificada, igualó sin goles con Holanda. Siete puntos sobre nueve, ocho goles a favor y uno en contra. México, por su parte, ganó el primer partido, empató el segundo y perdió el tercero. Una secuencia lógica indicaría que le toca volver a empezar y, en ese caso, debería ganar, pero pocas cosas lógicas tiene el fútbol y mucho menos en esto de las secuencias sin consideración del rival de turno. Fue buena la actuación del cuadro de Lavolpe cuando superó 3-1 a Irán; muy pobre cuando igualó sin goles con Angola y también cuando perdió 2-1 ante un equipo de suplentes de Portugal. Cuatro puntos sobre nueve, con cuatro goles a favor y tres en contra no dejan mucho margen para el optimismo.

Paso a paso, piensan en el plantel nacional. A nadie se le ocurre hacer ninguna referencia sobre Alemania o Suecia, el hipotético rival si se salta esta valla. Es más, están convencidos de que no exageran cuando dicen que México va a ser un rival muy duro. Se sabe que tienen un buen arquero, Oswaldo Sánchez, y un central de jerarquía internacional, Rafa Márquez; que juegan con una línea de fondo de tres que se van a hacer cinco cuando la pelota esté en los pies de los jugadores argentinos; que corren, meten y dejan la vida en cada pelota dividida pero no saben generar juego en la mitad de la cancha; que tienen un técnico muy avispado que va a cuidarse mucho de lo que pueda producir Riquelme; que van a apostar a Fonseca y Bravo sus fichas ofensivas, porque Borgetti está recuperado de la lesión pero no tiene ritmo de competencia y Franco va a ir al banco.

Ellos saben que pasaron los tiempos en los que la Argentina les ganaba con la camiseta, pero también son conscientes de las distancias técnicas que los separan de los argentinos y que en los partidos importantes siempre se impusieron los albicelestes. No lo declaran públicamente, pero los allegados al plantel dicen que les hubiese venido mejor jugar con Holanda. Lavolpe asegura que es mejor Argentina porque la conoce mucho más, lo que no implica que tenga fórmulas mágicas para neutralizar todas las variantes que le puedan desplegar Riquelme, Saviola, Maxi y, eventualmente, los del banco.

El ánimo en el plantel que conduce José Pekerman, ya se sabe, es muy bueno. Lo era antes de empezar el certamen, pero el nivel de optimismo subió al compás de los resultados y las actuaciones. Los once titulares van a ser los mismos del primer partido (la excepción puede ser Coloccini si no se recupera Burdisso, a quien Pekerman quiere esperar), en las posiciones que ocuparon en el segundo tiempo del partido ante Serbia. Es decir, Cambiasso inclinado hacia la izquierda y Maxi Rodríguez por la derecha, ocupando toda la franja, con Mascherano ubicado como cinco natural y Riquelme suelto como enganche. Coloccini no jugó bien contra Holanda, pero Pekerman decidió respaldarlo y desestimó otras posibilidades (Scaloni o Cufré). Lucho González, físicamente mejor, podría estar para jugar, pero se lo va a preservar. Las joyas, ya lo dijo Pekerman en conferencia, seguirán guardadas en el banco: Tevez que jugó un gran partido en función de equipo contra Holanda, y Messi, que anda por la cancha con la obsesión de regar de talento cada mata de pasto, van a esperar (y seguramente van a tener) su momento.

Será hoy, a las 16. La única verdad va a estar ahí. Todo lo demás (empezando por esta nota) será material descartable.

Compartir: 

Twitter

Bromas, alegría y fotos en el reconocimiento argentino del estadio en Leipzig.
 
DEPORTES
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.