ECONOMíA

El Gobierno sigue a las cornadas con los consignatarios en Liniers

Por la baja oferta en el Mercado de Hacienda, volvieron a subir los precios. Los consignatarios culpan a la lluvia, que dificulta el traslado. El Gobierno sospecha de maniobras especulativas.

 Por Fernando Krakowiak

Un día después de que el presidente Néstor Kirchner llamara a “no comprar carne si no bajan los precios”, la hacienda subió en Liniers 0,8 por ciento, acumulando un aumento de 6,6 en dos jornadas. Ayer ingresaron al mercado apenas 8135 animales, unos 3 mil menos que el promedio de los miércoles. El alivio llegó por el lado de las carnicerías, donde se comenzaron a notar algunas rebajas impulsadas por la fuerte caída de precios que hubo el viernes. Sin embargo, las fuentes consultadas por Página/12 coincidieron en afirmar que las rebajas durarán poco si la hacienda sigue subiendo en Liniers. En el Gobierno continúan analizando cuál es la mejor opción para avanzar sobre el mercado si los precios no aflojan.

Los consignatarios volvieron a asegurar ayer que la escalada de los precios se debe a la oferta insuficiente de ganado, agudizada por la decisión del Gobierno de prohibir la faena de animales de menos de 280 kilos. Incluso recurrieron a la ironía frente al boicot propuesto por Kirchner. Carlos Pujol, presidente de la Cámara Argentina de Consignatarios de Ganado, lo felicitó por llamar a la población a no consumir carne. “El Presidente entendió que estamos en una crisis y no hay suficiente ganado para abastecer un creciente consumo. El pedido que hizo lo veníamos realizando desde hace más de un año”, afirmó. Luego aseguró que le pareció “una reflexión simpática” que Kirchner los haya llamado “pícaros”. Pujol es el consignatario que el miércoles 8 de marzo, cuando el precio de la carne se disparó, vendió 18 terneros a 3,80 pesos el kilo encabezando la suba.

Por su parte, el titular de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Javier Jayo Ordoqui, quien ayer le pidió una audiencia a Kirchner, utilizó el remanido argumento del mal tiempo para justificar la suba de precios: “Ha llovido toda la semana y va a seguir lloviendo, y en esas condiciones es muy difícil abastecer el mercado”.

Desde diciembre de 2001 el índice novillo subió de 0,658 a 2,61 (296 por ciento), superando claramente la evolución del dólar y de la inflación, que acumula un 78 por ciento desde la devaluación. Si hubiera acompañado a este último indicador el índice debería estar cerca de 1,17. En el Gobierno sostienen que esos números son prueba suficiente de que los precios no suben por la lluvia o la prohibición de faenar ganado de menos de 280 kilos, sino por la especulación de los operadores del mercado.

Por eso, ayer continuaban las evaluaciones para saber cuál puede ser la mejor alternativa para neutralizar las distorsiones que ejercen los operadores. Fuentes del Gobierno señalaron a Página/12 que una posibilidad es implementar un sistema nacional de precios electrónico, como el que funciona en el mercado de los cerdos. Si se avanza con esa opción, Liniers seguiría funcionando, pero dejaría de fijar el precio de referencia como lo hace hasta ahora.

También se está evaluando la posibilidad de intervenir el mercado para que sea el Estado el encargado de administrar el predio en lugar de los consignatarios, quienes sólo quedarían operando como tales. Para evitar que los productores se vayan del mercado ante ese nuevo escenario, la medida iría acompañada de una norma que obligue a todos los ganaderos de la provincia de Buenos Aires a llevar sus animales a ese mercado (en la actualidad Liniers concentra el 40 por ciento de las operaciones de la provincia). En este caso, el principal interrogante pasa por la capacidad de control efectivo que le quedó al Estado a 14 años de la desregulación del mercado de la carne. Mientras tanto, desde la Comisión de Defensa de la Competencia continúan enviando oficios judiciales a consignatarios y frigoríficos solicitándole la declaración de sus ventas. Los datos van a ser cruzados con la información que posee la AFIP para evaluar la situación impositiva de las empresas.

Compartir: 

Twitter

En las carnicerías hubo un tímido reflejo de las rebajas del precio de la hacienda del viernes.
Imagen: Rafael Yohai
 
ECONOMíA
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.