EL MUNDO

Presentando al nuevo hombre fuerte que regirá los otros cuatro años de W.

Durante parte del año se lo dio por terminado, en gran parte por la guerra de Irak y el escándalo de las torturas de Abu Ghraib, pero ayer volvió por la puerta grande. Es Donald Rumsfeld, uno de los secretarios de Defensa más poderosos y polémicos que ha tenido Estados Unidos.

Donald Rumsfeld, secretario de Defensa de Estados Unidos, se ha consolidado como el hombre fuerte del gobierno del presidente norteamericano George W. Bush, quien lo confirmó en el cargo para continuar sin cambios la guerra en Irak y la lucha antiterrorista. Bush se reunió el viernes en la Casa Blanca con el jefe del Pentágono para solicitarle que continuara a la cabeza del Departamento de Defensa y éste accedió de inmediato, dijeron fuentes oficiales. “El secretario Rumsfeld es un líder probado en estos tiempos difíciles. Estamos librando un tipo diferente de guerra y es crucial que la ganemos”, señaló una de las fuentes.
La confirmación de Rumsfeld, quien fue secretario de Defensa en el gobierno del presidente Gerald Ford (1974-1977), hizo a un lado críticas de legisladores demócratas que exigieron su renuncia a mediados de este año al desatarse el escándalo por los abusos a prisioneros en la prisión iraquí de Abu Ghraib. Además, se lo había criticado por no haber enviado un número suficiente de tropas a Irak para combatir la insurgencia y asegurar la realización pacífica de las elecciones en ese país previstas para el 30 de enero. En su segunda etapa como secretario de Defensa del actual gobierno, Rumsfeld continuará con la transformación del sistema militar de EE.UU., a fin de convertirlo en una fuerza de reacción más rápida ante las nuevas amenazas como el terrorismo, dijeron las fuentes del Pentágono.
Uno de los logros principales en sus primeros cuatro años en el Pentágono ha sido la configuración de lo que el Departamento de Defensa califica como “un nuevo concepto disuasivo-estratégico que aumenta la seguridad y reduce el número de armas nucleares estratégicas”, libre de las limitaciones impuestas por el Tratado de Misiles Antibalísticos, al cual EE.UU. renunció en diciembre de 2001. El espaldarazo a Rumsfeld también coincidió el viernes con la renuncia de Marc Grossman, considerado el tercer miembro “blando” del servicio exterior de EE.UU. tras las dimisiones del secretario de Estado, Colin Powell, y su segundo, el subsecretario Richard Armitage.
La confirmación de Rumsfeld constituyó también el último paso importante en la recomposición de su gobierno iniciada por Bush tras ganar las elecciones del 2 de noviembre, en las que se aseguró un segundo mandato.
En el curso de esa remodelación, Bush designó el viernes al ex jefe de Policía de Nueva York Bernard Kerik como nuevo secretario de Seguridad Nacional y aceptó la renuncia del secretario de Salud y Servicios Sociales, Tommy Thompson. “Ha llegado el momento de que yo y mi familia avancemos al próximo capítulo de nuestra vida”, dijo Thompson en una carta de renuncia que lo convirtió en el octavo miembro del gabinete que decide abandonar sus funciones. Fuentes oficiales indicaron que Thompson podría ser sustituido por Mark McClellan, hermano del actual portavoz de la Casa Blanca, Scott McClellan, y quien ha ocupado ya varios altos cargos en la administración sanitaria.
Como secretario del todopoderoso Departamento de Seguridad Nacional, Kerik deberá encargarse de la mayor dependencia del gobierno creada tras los atentados del 11 de septiembre de 2001. “Es una persona que cuenta con la experiencia y la pasión necesarias para proteger a nuestros ciudadanos”, afirmó Bush sobre el ex policía que se dio a conocer por su labor tras los atentados del 11-S. El Departamento de Seguridad Nacional controla las actividades de otras 22 dependencias y a más de 180.000 empleados. “Sé lo que está en juego y prometo trabajar infatigablemente” para honrar a las víctimas de la fatídica fecha y la confianza del presidente, dijo el sucesor de Tom Ridge, quien anunció esta semana que abandonará el gabinete para dedicarse a actividades privadas.

Compartir: 

Twitter

Donald Rumsfeld tendrá ahora la oportunidad de hacer realidad la mayoría de sus ideas.
 
EL MUNDO
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.