EL PAíS › LA ADJUDICACIóN DE DEPARTAMENTOS EN SOLDATI A UNA MUTUAL LIGADA AL SUTECBA

Un plan de viviendas en el que todo queda en familia

La mutual 23 de Mayo, vinculada al Sutecba que conduce Amadeo Genta, consiguió a través del IVC la cesión de tres torres frente al Parque Indoamericano. Algunos de sus beneficiarios, junto a otros empleados del gremio, participaron de los ataques a los ocupantes.

 Por Gustavo Veiga

La mutual 23 de Mayo, vinculada al Sutecba, consiguió moderar el déficit habitacional que sufren sus afiliados porque dan con el target socioeconómico que exigía la Corporación del Sur, que le cedió a través del Instituto de Vivienda de la Ciudad (IVC) un terreno frente al Parque Indoamericano para levantar tres torres: un nivel “medio hacia arriba”, describe en su plan de viviendas. En su página web, la asociación sostiene que los empleados que representa –básicamente de la Legislatura porteña– “no desentonan con el perfil deseado”. Ellos accedieron a las 168 unidades de uno, dos y tres ambientes que integran el emprendimiento inmobiliario que vieron rodeado por los incómodos vecinos sin techo que ocupaban el predio de 130 hectáreas en Villa Soldati. Lo defendieron a como diera lugar, junto a habitantes de otros complejos de monoblocks, reforzados por barrabravas y empleados del gremio que lidera Amadeo Nolasco Genta. En su conducción ocupa un cargo clave el tesorero Genaro Trovato, socio de la constructora Vatro SA, que integra junto a dos familiares de su mismo apellido, Gabriel y Pablo. Sergio, uno de los tres hijos varones del sindicalista, es el jefe del Departamento de Construcciones de la Dirección General de Registro de Obras y Catastros (Dgroc). Toda autorización sobre planos y edificaciones en altura pasa por sus manos en el Gobierno de la Ciudad. Es una actividad relacionada con los intereses de la familia. La saga de los Trovato explica en parte cómo funciona el sistema de acceso a una vivienda en la Capital Federal, aunque el Sutecba se apuró a aclarar en un comunicado que su relación “con el organismo dependiente del gobierno porteño, encargado de ejecutar los planes de viviendas, es absolutamente institucional; no poseemos ni integramos cooperativas dedicadas a la construcción de unidades habitacionales”. La existencia de la mutual 23 de Mayo desmiente esta afirmación.

Genaro Trovato conoce muy bien la zona donde se produjeron tres muertes por la explosión de la crisis habitacional. Tenía domicilio en el barrio vecino Copello, edificio 13, 6º piso, departamento “F”. Julio Capella, el barrabrava de Huracán que afirma haber utilizado un arma de juguete para espantar a los ocupantes del Indoamericano, sería “culata” del sindicalista. Trabaja en la obra social del Sutecba e integró su junta electoral. Uno, Trovato, aún mantiene cierto anonimato fronteras afuera del gremio. El otro no. Retratado en posición intimidatoria en varias fotografías frente al parque, se transformó en la pista que llevaría hacia su mandante. La tercera pieza de este mecano es la mutual. Sobre ella posó su mirada Fabián Rodríguez, responsable de la página conurbanos.blogspot.com, quien descubrió mientras miraba televisión que entre varios de los vecinos autoconvocados de Soldati y Villa Lugano había delegados del Sutecba.

“En un principio pensé que podía ser una mera casualidad y que tranquilamente la zona de Lugano y Soldati puede estar llena de empleados municipales de alto rango. Pero no. Resulta que, preguntando, me vine a enterar de dónde venía el interés de toda esta gente que, al grito de “basta de villeros”, exigía que las autoridades terminaran de una vez por todas con la usurpación del parque”, apuntó. Rodríguez sabe de qué habla. La información de sus artículos ha sido reproducida por medios nacionales. Frente al Indoamericano están los departamentos casi terminados de la mutual. Se trata de las tres torres construidas por el IVC mediante una operatoria que data de 2003 y que a sus ocupantes les permitiría recibir exenciones impositivas, como no pagar el ABL durante el primer año y recibir un descuento del 50 por ciento en el segundo.

Constituida el 16 de enero de 2001 por personal de la Legislatura, la mutual cuenta con 350 asociados entre activos y adherentes. Su sede queda en la propia Cámara de Diputados porteña, en el 9º piso de Perú 143. A sus afiliados se les descuentan del sueldo los servicios utilizados. Sus principales autoridades son el presidente Angel Pedro Cabrera, el secretario Guillermo Antonio Cárcamo Loyola y el tesorero Walter Antonio Hernández Hernández. Entre sus objetivos, la 23 de Mayo se propone garantizar “asesoramiento gratuito en temas jurídicos, contables, informáticos, previsionales, psicológicos, financieros y de Seguros. Además, otorga subsidios por casamiento, bodas de plata, nacimiento, adopción, desempleo, jubilación, promoción escolar. Cuenta también con servicios de ayuda económica, proveeduría, recreación, deporte y turismo, entre otros”. Ninguno de esos servicios resultaría tan trascendente para sus socios como la adjudicación de las 168 viviendas frente al Parque Indoamericano.

La mutual lo hizo posible cuando participó del Programa de Autogestión para la Vivienda (PAV), comprendido en la Ley 341. Esta operatoria todavía la recuerda un ex integrante del directorio del IVC, Claudio Hoistacher: “Durante nuestra gestión y previo a la licitación de las 168 viviendas, se firmó un convenio con Sutecba. Supongo que debió haber existido algún acuerdo entre la mutual 23 de Mayo y el gremio y en el que habrá mediado la Corporación del Sur. En cualquier caso, para el IVC el titular de la operatoria en el marco del Ahorro Previo para Organizaciones Sociales (Ahpros) era el Sutecba, ya que las familias adjudicatarias las aportaría el sindicato, y quien debía asegurar que encuadraran en los requisitos del Programa también era el gremio”.

La obra de las tres torres comenzó en 2006 y estaba pautada su terminación para el año pasado. Pero el expediente tramitado en la ex Comisión Municipal de Vivienda se inició en 2003 y tiene el número 12.308. Según Hoistacher, “se implementó la operatoria por la Ley 341, con créditos blandos para gente que justificara su falta de vivienda. No sólo se armó con Sutecba, también se hizo con Judiciales y Tabacaleros”. Por entonces –recuerda el ex funcionario y abogado– se proyectaba culminar la construcción de 10.104 viviendas que estaban en distinto proceso de ejecución. No menos de 2 mil iban destinadas a mejorar la infraestructura edilicia de las villas porteñas. Y la mayoría quedaban comprendidas en distintas operatorias como el Ahpros, Mejor Vivir, Vivienda Porteña y otras, donde actuaban cooperativas de vivienda en barrios como La Boca. “La 341 generó un aluvión de demanda, hasta los legisladores pedían viviendas a discreción”, recuerda Hoistacher.

En este contexto se llega a la situación actual, donde el IVC no ha licitado una sola vivienda nueva desde 2006, y las que fue entregando se habían comenzado a construir en gobiernos anteriores al de Mauricio Macri. La mutual pudo cumplir su objetivo con un año de retraso en el lote de 1962,63 metros cuadrados donde se edificaron las torres. Uno de sus integrantes hasta participó de una mesa de trabajo integrada por funcionarios del gobierno porteño y vecinos con el objetivo de realizar mejoras en el Parque Indoamericano. Como quedó a la vista, nunca se concretaron.

Estas tribulaciones no impiden que el Sutecba conserve su influencia en los organismos de control de la ciudad. En Catastro hace años que tiene a un funcionario con poder de decisión: el arquitecto Sergio Trovato. Le dicen “el Nene” y muchos de los trámites sensibles pasan por sus manos. El hijo de Genaro, el viejo dirigente del Sutecba, vivió su momento de fama el año pasado. Quedó involucrado en una denuncia por irregularidades en el cumplimiento de normativas edilicias. En la calle Salvador María del Carril se levantaba un edificio que, según los vecinos, no las respetaba. La constructora Del Carril SRL era la denunciada. Su apoderada, como se comprobaría después, resultó ser la nuera del sindicalista y esposa del jefe de la Dgroc, Myriam Elizabeth Picone. Investigado por el programa CQC, Trovato admitió que la empresa podía haber cometido irregularidades, aunque por todo descargo, apuntó: “Mi mujer es mi mujer, yo soy yo”.

En el gremio presumen de una “fuerte operación antisindical”. Sus dirigentes la denuncian porque se los vinculó con los trágicos hechos del Parque Indoamericano. En el mismo comunicado donde se despegaron de las cooperativas o mutuales de vivienda, señalaron que “en la zona de Villa Soldati habita un número significativo de trabajadores municipales, propietarios e inquilinos de viviendas familiares. Todos ellos han obtenido departamentos cumpliendo con todos los requisitos que exige la normativa vigente siendo, por lo tanto, legítimos ocupantes”. Nadie les niega esa condición que, por otra parte, obtuvieron gracias a los buenos servicios de la mutual 23 de Mayo. Algunos de los afiliados al gremio, su fuerza de choque como el pistolero de juguete Capella, protegieron esos bienes. Viviendas que los afiliados del Sutecba levantaron porque cuentan con personajes influyentes como los integrantes del clan Trovato.

Compartir: 

Twitter

La mutual pudo cumplir su objetivo con un año de retraso en el lote de 1962,63 metros cuadrados donde se edificaron las torres.
Imagen: Leandro Teysseire
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.