Con críticas al neoliberalismo y un llamado a crecer hacia 2015, Hermes Binner cerró un congreso nacional del Partido Socialista (PS). El ex gobernador negó ante Página/12 que existan diferencias con su sucesor, Antonio Bonfatti. “No hay tal diferencia. Lo veo a Bonfatti cumpliendo sus funciones y lo hace muy bien. Hay que diferenciar el partido del gobierno.” Tras darse un abrazo en público con el titular del PS nacional Rubén Giustiniani, Binner se distanció de los sectores del FAP que participaron de los cortes a los accesos a Capital. “No somos de cortar calles. Terminás castigando a la gente que te votó”, dijo.

Los socialistas eligieron el coqueto Palais Rouge para su congreso, al que asistieron 700 representantes de todo el país, más otra buena cantidad de jóvenes militantes. Las remeras rojas predominaron entre el público, que discutió bajo las cuatro bolas de espejos gigantes del salón. Tres banderas rojas decían: “Libertad”, “Igualdad”, “Solidaridad”. Entre los concurrentes se mezclaron el gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti; la intendenta de Rosario, Mónica Fein, y los bloques de diputados nacionales y provinciales. Cada moción era votada por los congresales, que levantaban su boleta roja. Entre las mociones, Verónica Gómez señaló una para que las autoridades del partido se dividan 50 y 50 entre hombres y mujeres. El congreso terminó con un rechazo del PS a una eventual reforma constitucional.

“Vamos a terminar con la ine-ficiencia y la corrupción de TBA”, remarcó Héctor Polino, que reclamó que le quiten la concesión y se estatice la línea Sarmiento con participación de sus trabajadores. “Condenamos la irresponsabilidad de tirarse por la cabeza el transporte entre el gobierno nacional y la Ciudad”, se sumó Giustiniani.

El encuentro lo cerró Binner. Frente a un atril transparente con la rosa roja socialista, el ex candidato a presidente del FAP dijo que “tenemos experiencia de gobierno, pero no alcanza. No alcanza con Rosario y Santa Fe. Necesitamos crecer a todo el país”. “El neoliberalismo le saca a los que menos tienen para darle a los que más tienen”, remarcó Binner, quien citó a Adam Smith para explicar que “la crisis económica actual es diferente”, que no se dio por sobreproducción, sino porque “los pueblos son sojuzgados para arreglar las cuentas del capital financiero”. Bi-nner cuestionó sin mencionarlos a los socialismos europeos que fueron “detrás del carro de la centroderecha”. “No pedimos hacer la reforma agraria, quitarle la fábrica a otro... si es una fábrica de billetes, sería más interesante”, bromeó. Propuso un Consejo Económico y Social “como en Francia o Suiza”.

“No somos de cortar calles”, dijo haciendo referencia a las protestas de la semana pasada. “Nos opusimos a los cortes de ruta de la 125. Tenemos que buscar al otro y decirle que si quiere un cambio, no siga votando lo mismo. Que vote diferente.” Consultado por este diario sobre la participación de sectores del FAP en esas protestas, Binner dijo que “desconocía el motivo, como los programas Argentina Trabaja no llegaron a Santa Fe. Pasaron de largo”. “El corte es antipolítico”, se distanció. Por último, el ex gobernador negó diferencias con su sucesor con respecto a la mirada sobre el oficialismo. “No hay tal diferencia –dijo–. Nunca tenemos una posición agresiva hacia la figura presidencial. A la hora de gobernar, yo también participaba en actos.” Por otra parte, aseguró que “es imposible” dividirlos: “Con Bonfatti nos conocemos desde hace 40 años. Ibamos a trabajar como médicos en la villa miseria”.