El senador kirchnerista Miguel Angel Pichetto abandonó su proyecto de re-reelección como integrante del Consejo de la Magistratura a raíz de la impugnación que plantearon algunos de sus compañeros del organismo, anticipada por Página/12. Según la denuncia, un tercer mandato sería ilegal. La discusión por la continuidad del legislador se desató cuando su nombre apareció en la lista de quienes juran hoy como consejeros. En un comunicado que difundió ayer, el rionegrino anunció que aunque no advierte ningún “impedimento judicial” prefiere “dar un paso al costado” y “evitar una polémica mezquina”. Además, dijo que en el contexto post Misiones no quiere “poner al Gobierno en una posición incómoda”. Su reemplazante en el organismo que elige y sanciona a los jueces será María Laura Leguizamón.

El plan de Pichetto era claramente opuesto al mensaje “anti re-re” que viene dando el Gobierno desde la derrota en Misiones y que determinó que los gobernadores Felipe Solá y Eduardo Fellner archivaran sus candidaturas. Pichetto estaba en el Consejo desde su creación, en noviembre de 1998. Entró como menemista y termina hoy su segundo período, pero como kirchnerista. Un grupo de consejeros alertaba que si asumía otra vez violaría la ley, que no permite tres mandatos.

Enterada de la polémica, y ante las previsibles consecuencias políticas, Cristina Fernández de Kirchner convocó a Pichetto a una reunión de emergencia a última hora del miércoles. La conversación llevó finalmente a la renuncia del senador a su lugar en el órgano judicial. A la primera dama tampoco le había hecho gracia que un día antes de que ella anunciara el proyecto para achicar la Corte Suprema Pichetto descalificara –como una “vocinglería” poco “conveniente”– los reclamos de los jueces para que se resolviera la situación de las vacantes.

El abogado Beinusz Szmukler y la diputada Marcela Rodríguez (ARI), consejeros, presentaron ayer a la mañana dos impugnaciones contra Pichetto con un pedido para que se suspendiera su asunción. Una fue dirigida al presidente de la Corte, Enrique Petracchi, encargado de tomar los juramentos. Otra fue para el titular del Senado, Daniel Scioli, que eleva los nombramientos para la Magistratura a propuesta de los bloques.

La denuncia advertía que ni la polémica ley de reforma del Consejo de la Magistratura que votó el Congreso en febrero último ni la anterior permiten un tercer período. Según la vieja norma, los consejeros podían “ser reelegidos por una vez en forma consecutiva”. De acuerdo con las reglas actuales sólo puede haber reelección “con intervalo de un período”. El mandato sigue siendo de cuatro años. En cualquier caso “queda claro que el senador Pichetto tiene vedado” el reingreso, señalaba el texto.

El senador de Río Negro razonaba que ante una nueva ley “vuelve todo a cero” y los consejeros debían considerarse en “estado de primer mandato”.

Después del mediodía de ayer avisó públicamente que desistía de su ambición en un comunicado donde reiteraba aquel concepto. “Es un absurdo jurídico”, decía la impugnación de Szmukler y Rodríguez. “Si el legislador hubiese querido hacer una especie de borrón y cuenta nueva, lo tendría que haber establecido allí (en la ley)”, señalaron. Pusieron como ejemplo la “disposición transitoria” de la reforma constitucional de 1994 que ponía límite a la re-re de Carlos Menem.

“No se trata de una reelección”, replicó Pichetto. “Ha habido una imputación política por parte de miembros salientes del Consejo y prefiero dar un paso al costado”, alegó. El mismo contó que luego de analizar la situación con la senadora Kirchner, la conclusión fue que “desde el punto de vista político no era conveniente producir un debate sobre la continuidad en el cargo en el Consejo”. “Como representante parlamentario por el oficialismo, no quiero colocar al Gobierno en una posición incómoda”, se despidió.

Días atrás, cuando Petracchi vio a Pichetto en la nómina de consejeros listos para asumir, le hizo saber que su situación no parecía del todo regular. Cuentan en Tribunales que Su Señoría también le habría hecho llegar la observación a la senadora Fernández de Kirchner.

Hoy jurarán los nuevos integrantes del Consejo. En lugar de Pichetto, irá Leguizamón, otra senadora K (ver recuadro). Por el Poder Ejecutivo, se integrará la viceministra de Justicia, Marcela Losardo, ex asesora del jefe de Gabinete. Volverán a asumir los demás legisladores, aunque cambiaría un radical. El organismo, además, dejará de tener 20 miembros y pasará a tener 13. Una reducción que, según las críticas desplegadas desde el año pasado por ONG y oposición, le da al oficialismo poder de veto en las decisiones. Permitir una re-re ya hubiera sido demasiado.