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Otras voces

- Aníbal Fernández, ministro del Interior: “Yo voy a seguir batiendo el parche cada vez que tenga la oportunidad, reclamándoles a los fiscales que actúen en consecuencia y sancionen a los responsables (...) que actúen en consecuencia, si hay fotos, si hay filmaciones, saben cómo identificar a los responsables, que los sancionen en consecuencia y se terminó el tema”, señaló el funcionario. Pero al referirse a las imputaciones del juez Norberto Oyarbide contra Luis D’Elía por la protesta en la comisaría 24ª de la Boca dijo que “carecen de sustento”. “A la comisaría ni le prendieron fuego, ni la quemaron ni mataron a nadie”, sostuvo.
- Alberto Fernández, jefe de Gabinete: “Parece que D’Elía estuvo más cercano a tratar de tranquilizar la situación que a participar de la misma”, dijo Fernández en alusión a la toma de la seccional 24ª. “Llegó poco después –señaló–, para poner paños fríos.”
- Oscar Parrilli, secretario general de la Presidencia: “Ningún argentino puede desconocer, más allá de su postura frente a los métodos de reclamo, la existencia de una sociedad absolutamente marginada y empobrecida. Es por eso que la primer política del Gobierno fue el diálogo”, dijo. “No hay inacción policial, lo que no hay es una acción de represión. Pero ante cada conflicto que hay, el Ministerio de Justicia, a través de la Secretaría de Seguridad Interior, está presente evitando precisamente el agravamiento de los conflictos sociales”, señaló Parrilli. El conflicto en la comisaría 24ª, dijo, “se resolvió de manera pacífica, no hubo un solo rasguño, ni una sola herida a ningún policía, ni a ninguna de las personas”.
- Luis D’Elía, titular de la Federación Tierra y Vivienda (FTV): “Nos duele la xenofobia. En Palermo, en avenida Cabildo, los vecinos por un caso de gatillo fácil indignados van y queman la comisaría. En Palermo eso está bien, en la Boca está mal. ¿Quiénes son los procesados en Palermo por Oyarbide y tratados como criminales?”, preguntó el piquetero oficialista. El episodio en la comisaría 24ª luego del asesinato de Martín Cisneros, dijo, “no fue una ocupación, la gente sabía dónde estaba el asesino, permanecimos en el lugar hasta que lo fueran a buscar, pero la policía no quería ir a buscarlo”. “Si la gente no estaba ahí no teníamos asesino preso hoy”, señaló. “Yo ahora quiero saber quiénes protegían a (Juan Carlos) Duarte, cómo es que un prófugo estuvo tres años prófugo, amenaza, mata y conocía a la policía y no estaba preso.”

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