SOCIEDAD

Llegan los federales

“Hay una persona despiadada suelta. Por ello, yo comprometo todos los recursos del gobierno federal para ayudar a las fuerzas locales en su captura”. Con esa frase, el presidente norteamericano George W. Bush indicó al país que el francotirador de Maryland dejaba de ser un caso local para convertirse en la prioridad de su gobierno, desplazando de ese lugar a la inminente invasión a Irak. Aclaró, además, que está “profundamente entristecido por la reciente tragedia que hemos visto aquí en Washington” y que reza “todos los días por la seguridad de sus conciudadanos”. Inmediatamente tras estas declaraciones, 600 agentes del FBI, 500 oficiales de la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas y 50 profesionales del servicio secreto se desplegaron en el terreno, para hacerse cargo del rastrillaje y de la búsqueda del asesino, desplazando del comando de la operación a la policía local. Hasta ayer, los investigadores no habían logrado obtener ninguna pista clara que lleve a la captura del asesino, por lo que muchos empezaron a dudar de su capacidad. Esta sensación se tornó tan fuerte que incluso el propio asesino, en una nota encontrada la semana pasada, tacho de incompetente a la policía por hacer caso omiso de seis de sus llamadas, lo que motivo, según él, que tuviera matar a 5 personas más para que sus peticiones sean escuchadas.

Compartir: 

Twitter

 
SOCIEDAD
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.