Al buscar en los bancos de imágenes alguna fotografía para ilustrar esta nota bastó consignar “servicio doméstico” o cualquiera de los pocos sinónimos que no sean insultantes con los que se define a la trabajadora en cuestión, para encontrarse con una asombrosa variedad. Con delantal elegante, con delantal común, sin delantal, más sexy, nada sexy. Pero de esa gran oferta, todas repiten un detalle nada menor: ninguna de las fotos tienen la cara de la modelo. Las agencias han decidido decapitar a la mucama para que quienes vamos a hablar de ella no tengamos un gran compromiso a la hora de mostrarla. Si es rubia y linda, no es una mucama completa. Y si no es rubia y linda, tal vez no sirva para ilustrar. No hay mucho espacio aquí para analizar las razones de este recorte pero sí para dejar planteada la inquietud. Tal vez sea la misma razón que hace que nunca jamás Mister Musculo ni ninguno de sus amigos llegue a una casa y se encuentre con una mucama. Los productos de limpieza le hablan al ama de casa que en su gran mayoría hoy por hoy está trabajando afuera y cuando llega, si puede, hace la lista del mercado consignando: “lo que necesites para la limpieza”. La señora sin cara elige la marca y comprueba si todos esos Mister que tanto prometen, cumplen o no.