El conservador Mariano Rajoy anunció que renovará a seis de sus 13 ministros para su segundo mandato como presidente del Gobierno de España, al que llegó tras más de diez meses de bloqueo político. Los designados jurarán mañana ante el Rey Felipe IV y luego celebrarán su primera reunión del Consejo de Ministros.

En lo económico, Rajoy optó por la continuidad al mantener a Luis de Guindos en Economía y a Cristóbal Montoro en Hacienda. Deberán encarar un ajuste de 5500 millones de euros para cumplir con los objetivos de déficit prometidos a la Unión Europea.

Al Gabinete entran figuras relevantes del Partido Popular como la secretaria general María Dolores de Cospedal, quien ocupará la cartera de Defensa, y se mantienen otras como la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría. Sáenz de Santamaría acumula más poder porque asume la cartera de Administraciones Públicas y se encargará de la respuesta del Ejecutivo al desafío separatista catalán.

En tanto, la vicepresidenta dejará de ser la voz principal del Gobierno ya que el nuevo portavoz será el ministro de Educación, Cultura y Deportes, Íñigo Méndez de Vigo, quien repite ministerio. Continúan también en el Gobierno la ministra de Empleo, Fátima Báñez; el ministro de Justicia, Rafael Catalá, y la titular de Agricultura, Isabel García-Tejerina.

La principal sorpresa fue el nombramiento al frente del Ministerio de Exteriores de Alfonso Dastis, actual representante permanente ante la UE, en reemplazo de José Manuel García-Margallo. En tanto, el titular de Interior Jorge Fernández Díaz será sucedido por Juan Ignacio Zoido, alcalde de Sevilla entre 2011 y 2015, mientras Íñigo de la Serna, actual alcalde de Santander, asumirá como ministro de Fomento.

El nuevo equipo no fue bien recibido por los socialistas, quienes permitieron con su abstención que Rajoy asuma el Gobierno pero siguen siendo la primera fuerza opositora en el Parlamento, donde los conservadores no tienen mayoría. "No ha hecho un gobierno para el diálogo", expresó a la prensa Mario Jiménez, portavoz de la gestión interina que dirige interinamente el PSOE. “Le anticipa al gobierno serias dificultades en una legislatura que tendrá que ser de diálogo", completó.

Desde el izquierdista Podemos, tercera mayor fuerza en la cámara, Rafael Mayoral consideró que es “un gobierno de la continuidad y de la profundización del sufrimiento de la mayoría social"