Las indagatorias abarcan a "Walter Piller, Horacio Longarte, el encargado del área de electricidad y electrotécnica de la firma Poliequipos en el Hospital D. F. Santojanni, en el turno de la mañana, de apellido Guethi; Pedro Justich y Mario Rocco".

Los cinco aparecen investigados por la operación de mantenimiento que dejó sin energía a los respiradores artificiales y causó presuntamente la muerte de los pacientes Antonio Trimboli y Norma Fernández.

Según informaron fuentes judiciales, las indagatorias serán tomadas entre el 23 y el 26 de este mes por el juez subrogante del juzgado de instrucción número 6, Gustavo Pierretti. Las indagatorias fueron pedidas el mes pasado por la fiscal de instrucción Mónica Cuñarro. Piller era el Jefe del Departamento de Recursos Físicos del Hospital Santojanni; Longarte era jefe de antenimiento de los equipos médicos del nosocomio; Guethi era el encargado de electricidad de la empresa Poliequipos; Justich, Director provisorio del Hospital, Rocco estaba a cargo de la Dirección General de Recursos Físicos en Salud del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

Según el pedido de la fiscal, aquel día, "a las 15.20 en forma imprevista y por las maniobras realizadas por operarios de la empresa Poliequipos en el tablero que alimenta de electricidad a los compresores de aire comprimido", tal como habían acordado previamente los imputados.

"Tales tareas se realizaron sin ser informados los Jefes de departamento de la Unidad de Terapia Intensiva, shock room, ni quirófanos del Hospital, pese a que ello se encuentra expresamente establecido, y es práctica diaria en cualquiera de los servicios de un hospital en los que se van a efectuar tareas de mantenimiento", añade el dictamen.

Según Cuñarro, por espacio de unos cinco minutos y "como resultado del puente, se cortó el suministro de aire comprimido de los respiradores a los que se encontraban conectados los pacientes", dos de los cuales fallecieron.

La fiscal también detectó que la empresa que prestaba el servicio de mantenimiento estaba operando en condiciones presuntamente irregulares.

"En el año 2003 el contrato de concesión se encontraba vencido, sin perjuicio de lo cual mediante sucesivas prorrogas -sin nuevo llamado a licitación- la firma continuaba a cargo de dichas tareas", consigna el dictamen. Además, "tanto los compresores de aire comprimido como el tanque reservorio resultaban deficientes en su capacidad para la cantidad de respiradores artificiales a los que debían suministrar aire comprimido".

"También era deficiente su funcionamiento puesto que ambos compresores lo hacía simultáneamente -por lo que el desgaste era parejo- corriéndose un grave riesgo de que, de fallar uno, también lo hiciera el otro; y carecían de alarma que diera aviso cuando empezaba a fallar, es decir con anterioridad a que el tanque se vaciara", añade el dictamen.

El llamado a indagatorias destraba una causa que estaba virtualmente empantanada desde su origen y que desencadenó en un fuerte cuestionamiento a la actuación de la anterior jueza subrogante, María Guillermina Martínez. La causa estuvo a punto de ser archivada, pero Cuñarro cuestionó la actuación de la jueza, quien finalmente fue apartada del caso y su subrogancia (jueza interina) no fue renovada.

Fuentes judiciales dijeron que del dictamen fiscal "podrían desprenderse supuestas responsabilidades de ex funcionarios porteños", para quienes podrían pedirse también investigaciones penales.

Fuente: DyN