Cinco de los siete gremios aeronáuticos decretaron para hoy un paro nacional de 24 horas a partir de las 6 de la mañana en Latam Argentina. Acusan a la empresa de estar produciendo “un achicamiento” y advierten que están en peligro los puestos de trabajo.

La medida de lucha es llevada adelante por los trabajadores de las Asociaciones del Personal Aeronáutico (APA), de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), del Personal Técnico Aeronáutico (APTA), de Tripulantes de Cabinas de Pasajeros de Empresas Aerocomerciales (Atcpea) y de la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA). En un comunicado de prensa, los sindicatos denuncian que, a pesar de que cada vez más empresas vinculadas al holding están operando rutas en el país, estos beneficios no se reflejaron en Latam Argentina. Según los gremios, la filial local sufre “un indudable achicamiento reflejado en la reducción de la plantilla de personal, en el cierre del call center, en la disminución de frecuencias y en el cierre de las bases San Juan y Bahía Blanca”. Además, esta semana la empresa chilena anunció la desafectación de dos aeronaves A-320 para llevarlas a filiales regionales argumentando “problemas coyunturales”. Rosario Altgelt, gerente general de la empresa, se negó a firmar cualquier tipo de compromiso que determine una fecha de devolución de esos aviones al país.

Ayer temprano los trabajadores de Latam Argentina realizaron asambleas que generaron la cancelación o postergación de vuelos de la aerolínea en Ezeiza y Aeroparque. Pablo Biró, secretario general de APLA, acusó al ministro de Trabajo, Guillermo Dietrich, y al vicejefe de Gabinete, Gustavo Lopetegui, de permitir el vaciamiento de la empresa. “Estos procesos empiezan con despidos de a veinte, cuarenta y terminan con la totalidad de los trabajadores. Esto ya lo vivimos”, advirtió el sindicalista.

Por su parte, Paula Marconi, titular de Atcpea, afirmó que “la política de centralización y extranjerización de Latam perjudica a los trabajadores porque se pierden puestos de empleo locales como consecuencia de la centralización en países como Chile o Brasil”.

En el comunicado, los gremios aseguran que advirtieron tanto al Gobierno como a la compañía del achicamiento de la empresa y que, aunque apelaron al diálogo de manera incansable, no obtuvieron “ningún tipo de respuesta” a sus reclamos.