Congelar la incorporación de trabajadores en el sector público durante dos años y reducir el presupuesto para las empresas públicas son los componentes principales de ajuste en el Estado nacional. Las medidas definidas por el ministro de Modernización, Andrés Ibarra, como un paquete de “austeridad y transparencia para el ahorro” buscarán recortar el el gasto en 20.400 millones de pesos al año. Con la bandera de la reducción del déficit fiscal en alto, el paquete contempla la terminación de los contratos de empleo canalizados a través de las universidades, la suspensión en el pago de adicionales y la revisión en la estructura de personal de los organismos descentralizados. Los anuncios incluyeron una reducción en los viáticos para los viajes de los funcionarios y una minimización en la flota de vehículos oficiales. El ajuste será instrumentado a través de un decreto que será publicado la próxima semana. 

“Tenemos que bajar el gasto. Esto tiene que ver con igualar el funcionamiento del Estado con lo que ocurren en el sector privado. Los privilegios del sector público tienen que terminarse”, expresó el titular del Palacio de Hacienda, Nicolás Dujovne, que participó del anuncio aunque se retiró de manera anticipada sin responder preguntas. En un intento por legitimar el recorte que ponen en riesgo más de 7000 mil puestos de trabajo en el Estado, los encargados del anuncio enfatizaron que solo podrán viajar al exterior en clase business los funcionarios con cargo de ministro, la vicepresidenta y el presidente. “Puede sonar poco en términos de ahorro: 20 mil millones de pesos al año. Pero es dinero disponible para bajar el déficit. Es gasto improductivo. Es un paso más en el proceso de reforma permanente”, explicó el encargado de las negociaciones con el FMI. 

Como Dujovne abandonó el Salón de los Pueblos Originarios de la Casa Rosada antes de  terminar los anuncios el encargado de las precisiones fue Ibarra. “No tiene nada que ver con el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Es importante para darle la señal a los argentinos de cómo vamos a lograr la reducción del déficit”, consideró el funcionario para quien los anuncios forman parte de “un proceso permanente de transformación del Estado, son medidas que tienen que ver con hablar de austeridad y transparencia para el ahorro”.

El anuncio iba a realizarse por la mañana en el Palacio de Hacienda pero las autoridades retrasaron el evento y modificaron la locación cuando ya arrastraban una hora de demora para eludir la presencia de una treintena de trabajadores del ministerio pertenecientes al gremio ATE que cuestionaban el ajuste en esa dependencia. “Reclamamos a estos funcionarios que dejen de despedir trabajadores en todos los organismos del Estado y que frenen el ajuste sobre las políticas públicas. No pueden seguir desarticulando derechos y recortando gastos en el Estado. No hubieran bajado retenciones al campo, no le hubieran condonado la deuda a las empresas energéticas, reducido los aportes patronales, no puede ser que siempre la paguemos los empleados del Estado”, expresó uno de los delegados del sindicato que ingresó al microcine donde Dujovne e Ibarra tenían previsto presentar los pormenores del nuevo ajuste en los gastos de la Administración Pública Nacional. “El techo salarial contrasta violentamente con la política de tarifazos, devaluación y negociados vía Lebac con los que el gobierno ha beneficiado a las empresas privatizadas de servicios públicos, petroleras y bancos”, cuestionaba el volante distribuido por los trabajadores que convocaba a un “Ruidazo contra la rebaja salarial”.

La protesta de los trabajadores de Hacienda: