Taiwán realizó este jueves nuevas maniobras militares con fuego real, luego de que China culminara sus propios ejercicios y reiterara amenazas de recuperar la isla por la fuerza en el marco de una crisis desatada por la visita de la líder del Congreso de Estados Unidos.

Lou Woei-jye, el vocero del Octavo Cuerpo del Ejército de Taiwán, dijo que el Ejército disparó este jueves obuses y bengalas como parte de un simulacro defensivo de una hora de duración en la zona más meridional de la isla, Pingtung, el mismo donde ayer realizó otro similar. "Tenemos dos objetivos con las maniobras, el primero es certificar las condiciones adecuadas de artillería y su mantenimiento, y el segundo es confirmar los resultados del año pasado", dijo el vocero.

Por su parte, El Ejército Popular de Liberación (EPL) organizará patrullas regulares de combate en las aguas alrededor de Taiwán, según anunció el portavoz castrense Shi Yi, citado este jueves por el diario China Daily. Shi, portavoz del Comando del Teatro de Operaciones del Este, aseguró el miércoles que las recientes maniobras militares chinas, tanto aéreas como marítimas, lograron los objetivos de su misión y pusieron a prueba de manera efectiva la capacidad de combate de las tropas del Comando. Además, explicó que las fuerzas del Comando del Teatro de Operaciones del Este protegerán de forma decidida la soberanía nacional y la integridad territorial de China.

Sumado a esto, el portavoz del Ministerio de Defensa de China Tan Kefei aseveró que las maniobras son una poderosa disuasión para las fuerzas separatistas de Taiwán y las injerencias extranjeras y añadió que las acciones militares chinas son necesarias y justificadas para proteger la soberanía nacional. Tan agregó que los ejercicios militares se llevaron a cabo de acuerdo con las leyes y prácticas nacionales e internacionales y que el proceso de reunificación es imparable.

"Estamos dispuestos a ejercer la máxima sinceridad y los mayores esfuerzos para lograr una reunificación pacífica, pero el EPL no dejará espacio para que las fuerzas separatistas de Taiwán y las potencias extranjeras logren sus objetivos", concluyó el portavoz.

Las maniobras chinas

El último ejercicio militar chino llegó este miércoles después de que China anunciase el fin de sus maniobras, señalando que sus fuerzas han completado con éxito varias tareas en el estrecho de Taiwán. En el mismo anuncio, China dijo que continuará realizando entrenamiento militar y preparándose para la guerra.

En un libro blanco publicado el miércoles por la Oficina de Asuntos de Taiwán del Consejo de Estado chino, los autores aseguran que Pekín no renunciará al uso de la fuerza y se reserva la opción de tomar todas las medidas necesarias. "Estamos listos para crear un vasto espacio para la reunificación pacífica, pero no dejaremos lugar para actividades separatistas de ningún tipo", afirma el libro blanco sobre Taiwán que fue publicado por ultima vez en el año 2000.

Por su parte, la Oficina de Asuntos Taiwaneses del Partido Comunista de China dijo el jueves en un comunicado que las acciones rebeldes de Taipéi son una cachetada en el rostro y no pueden detener la tendencia histórica de reunificación con China continental.

Las maniobras taiwanesas

La presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, dio las gracias a las tropas en una visita este jueves al cuartel general de las fuerzas aéreas. "La amenaza militar de China no ha disminuido", dijo en un comunicado publicado en Facebook. "No escalaremos el conflicto ni provocaremos disputas, defenderemos firmemente nuestra soberanía y seguridad nacional, y en primera línea la democracia y la libertad", agregó la mandataria.

El ejército de Taiwán, por otro lado, restó importancia a sus maniobras militares y dijo que estaban programadas antes de las realizadas por China pero que, paradójicamente, coincidieron. "Tenemos dos objetivos con las maniobras, el primero es certificar las condiciones adecuadas de artillería y su mantenimiento, y el segundo es confirmar los resultados del año pasado", estableció Lou Woei-jye.

El ministerio taiwanés de Relaciones Exteriores se pronunció el jueves contra el modelo de "un país, dos sistemas" que Pekín propone para la isla. "Todo el pronunciamiento chino va absolutamente en contra del statu quo (entre China y Taiwán) y su realidad", declaró en conferencia de prensa la portavoz del ministerio, Joanne Ou. "China utiliza la visita de (...) Nancy Pelosi como excusa para destruir el statu quo, aprovecha la oportunidad y busca problemas, intentando crear una nueva normalidad para intimidar al pueblo taiwanés", agregó.

El jueves pasado, el ejército de la isla dijo haber detectado 21 aviones y seis barcos chinos operando en el estrecho de Taiwán, sin especificar si estaban realizando operaciones. De ellos, 11 aviones cruzaron la línea media, una demarcación no oficial entre China y Taiwán que Pekín no reconoce.

Los juegos de guerra con fuego real, de una intensidad no vista en décadas, incluyeron el lanzamiento de misiles convencionales de largo alcance y el bloqueo del espacio aéreo y marítimo en seis zonas situadas frente a las costas de Taiwán, ejercicios que Taipéi describió como un bloqueo de la isla y una irresponsabilidad.