“Buscando nietas y nietos. Buscándote”. Con ese lema, el Festival Teatro x la Identidad abre un nuevo capítulo de su ciclo 2022 e irrumpe en la cartelera teatral de noviembre con dos propuestas que ponen el foco en la cuestión identitaria. La cita será este domingo 6 de noviembre, en el Centro Cultural Kirchner (Sarmiento 151), a las 19. Allí subirá a escena Implosión de identidades, con dirección de Mariela Asensio, que continuará todos los domingos del mes, a las 20, en otros espacios. El 13, con función en el Espacio Cultural Carlos Gardel (Olleros 3640). El 20, en el Espacio Cultural Julián Centeya (San Juan 3265). Y el 27, en el Espacio Cultural Resurgimiento (Artigas 2262).

Por otro lado, se suma A propósito de la duda, la obra de Patricia Zangaro con dirección de Daniel Fanego, que podrá verse los lunes a las 20. El 7, en el Teatro Regina (Santa Fe 1235). El 14, en el Teatro Astros (Corrientes 746). El 21, en Caras y Caretas Teatro (Sarmiento 2037). Y el 28, en el Teatro Metropolitan Sura (Corrientes 1343). Todas las funciones son con entrada gratuita y se ofrecen en una edición especialmente dedicada al actor Arturo Bonín, quien fuera un activo participante del movimiento.

Fue precisamente la obra de Zangaro la que dio inicio al ciclo. Estrenada en junio del 2000, en el Centro Cultural Rojas, la pieza llevaba a la escena el horror de la apropiación de menores durante la última dictadura, y les daba voz a los nietos, nietas y Abuelas de Plaza de Mayo que buscaban reparación. “¿Y vos? ¿Y vos? ¿Y vos sabés quién sos?”, es la pregunta que atraviesa a la puesta.

“Fue una creación colectiva”, cuenta Fanego, quien dirigió la primera versión con un elenco de 30 personas, y que vuelve a asumir ese rol en una nueva adaptación interpretada por José Manuel Espeche, María Forni, Pepe López, Pablo Mariuzzi, Elena Petraglia, y con Raquel Albéniz, Susana Cart y Amancay Espíndola en el papel de tres Abuelas.

Inicialmente, iban a realizarse sólo 5 funciones. Pero “se produjo el milagro”, recuerda Fanego. “Cuando estábamos haciendo los preparativos, la gente de la sala vino a decirme que había una fila que daba vuelta la manzana, y que teníamos que agregar una segunda función para ese mismo día”. Gracias a ese éxito, en 2001, y en el marco de una asamblea celebrada en el Teatro del Nudo, se creó el ciclo.

300 es el número de nietos y nietas que aún no recuperaron su identidad. Y el propósito de TxI de ayudar en esa búsqueda sigue vigente. “Este proyecto nos transformó”, asegura el actor, quien actualmente realiza una gira con su unipersonal Modestamente Fanego, donde comparte autoría junto con Mariano Saba y Daniel Casablanca. “En mis 45 años de profesión no me ha ocurrido nada de la magnitud de Teatro x la Identidad. Yo lo viví epidérmicamente”.

Cientos de teatristas se sumaron a la iniciativa a lo largo de los años. Y la directora y dramaturga Mariela Asensio se metió de lleno en la curaduría del ciclo desde la pandemia, y ahora presenta Implosión de identidades, de su propia pluma, y con actuaciones de Adriana Barraza, Emiliano Figueredo, Ariel Pérez de María y Federica Presa, música en vivo de Ramiro Abrevaya y audiovisuales de Marina Lovece.

Implosión de identidades, de Mariela Asensio

Construido a partir de doce monólogos (¿Cómo? de Luis Rivera López; Soy el que quieras de Fabián Díaz; Rosaura tatuada de Pablo Dos Reís; Estar en cartel de Alejandro Lifschitz; El cabello por el suelo de Andrea Garrote; Inspección digital de Facundo Zilberberg; Del amor en los tiempos del WhatsApp de Macarena Trigo; El parecido de Mariano Saba; El espectador de Mariano Saba; El hombre de mediana edad de Jimena Aguilar; Cuando ves pasar el tren de Malena Tytelman y Una estirpe de petisas de Patricia Zangaro), el texto construye personajes que se interrogan a sí mismos en torno a su existencia.

“Me interesaba abordar la identidad, pero no de manera literal, y busqué jugar con el humor para llegar a lo sensible desde ese lugar, porque la idea no es imponer sino que la temática vaya calando de a poco en el público”, apunta Asensio, y agrega: “Creo en la capacidad que tiene específicamente el teatro de tocar una fibra particular y poder iluminar estos hechos. Yo me emocioné mucho armando esta puesta, sobre todo en las partes en las que aparece Adriana Barraza, que interpreta a una Abuela de Plaza de Mayo. Es imposible no emocionarse cuando tomamos conciencia de que todavía hay tantas personas que no conocen quiénes son ni de dónde vienen”.

Adriana Barraza es mexicana, pero pisó la Argentina por primera vez en 2002, y desde ese año mantuvo un vínculo permanente con TxI. “Me conmoví mucho con las primeras obras que vi, y siempre pensé que no podía haber mejor espacio para nuestra profesión que eventos como éste. En mi país hay más de 100.000 desaparecidos por distintas circunstancias, y existen las madres buscadoras, que buscan en el desierto a sus hijos abriendo hoyos. Por eso me conmueve mucho el trabajo de las Abuelas, y por eso es muy emotivo poder interpretar a una de ellas”, cuenta la actriz, que también investigó en 2007 la vida de Azucena Villaflor para protagonizar un proyecto artístico que luego quedó trunco.

La herida sigue abierta. Y el trabajo de TxI busca poner memoria donde quiere instalarse el olvido. “Tener la certeza de que aún hay personas que fueron arrancadas de sus familias, y a las cuales les han mentido toda su vida, es algo muy difícil de tramitar. Ese horror está vigente. Y está buenísimo que sigamos hablando de eso a través del arte. Sobre todo hoy, en un momento en el cual el concepto de la identidad es algo que está en agenda con una diversidad de lecturas”, reflexiona Asensio.

“De dónde venimos y hacia dónde vamos son preguntas que nos hacemos todos a lo largo de nuestra vida. Y debe ser terrible voltear la cabeza y no saber cuál es el camino que nos precede. Saber eso es el derecho de cualquier ser humano. Por eso es tan importante que exista este ciclo, porque puede ayudar a muchos en esa búsqueda”, añade en la misma línea Barraza.

“Mientras haya una sola persona que tenga su identidad cambiada, está puesta en duda la identidad de todos”, concluye Fanego, replicando la consigna que se pronuncia en A propósito de la duda. “TxI continúa porque la pregunta que nos interpela en torno a quiénes somos es algo fundante y que se sostiene en el tiempo”.

*Las entradas gratuitas se entregarán en los teatros, los días de función, desde una hora antes de la función, hasta agotar el aforo disponible. Toda la información y programación en www.teatroxlaidentidad.net y en las redes sociales de Instagram y Twitter (@txibuenosaires) y Facebook (Teatroxlaidentidad).

Con el compromiso de siempre

Por Patricia Zangaro*

A propósito de la duda nació de la necesidad de acompañar desde el teatro la lucha de las Abuelas de Plaza de Mayo por recuperar a sus nietos y nietas apropiados por la dictadura. A partir de una serie de testimonios, fue surgiendo una dramaturgia coral que, con dirección de Daniel Fanego, se estrenó un lunes de junio del año 2000 en el Centro Cultural Rojas. Para nuestra sorpresa, esa noche debimos hacer dos funciones, porque el público desbordaba la sala. Y lo mismo sucedió durante todos los lunes de aquel año, en el Rojas primero, y en el Centro Cultural Recoleta después. Una repercusión semejante sólo es posible cuando aquello que se pone en el centro de la escena coincide con una urgencia social. Eran los tiempos en los que campeaba la impunidad de los crímenes de lesa humanidad, merced a las leyes de punto final y obediencia debida y a los indultos del menemismo. El fenómeno se multiplicó al año siguiente, y dio origen al ciclo de Teatro por la Identidad que, desde entonces y hasta ahora, convoca a teatristas de todo el país, y que se ha extendido más allá de nuestras fronteras. A más de veinte años de su alumbramiento, los casi cuatrocientos hombres y mujeres que aún no conocen su origen hacen ineludible la pertinencia de un teatro que interpele a la sociedad sobre el capítulo más oscuro de su historia. Por eso A propósito de la duda vuelve hoy a la escena. Con un formato de cámara, acorde con la austeridad de estos tiempos, pero con el compromiso de siempre con la causa de las Abuelas y con la misma entrega de los actores y actrices que forman parte de esta renovada puesta de Daniel Fanego.

*Dramaturga. Autora de A propósito de la duda