La legisladora porteña Ofelia Fernández explicó que su decisión de no renovar su banca en las próximas elecciones se debió a una necesidad de “reinventar y rediscutir la estrategia electoral” en la Ciudad de Buenos Aires, frente a una gestión nacional “que no salió como esperábamos ni queríamos”.

La determinación de la dirigente que integra el espacio que lidera Juan Grabois es también una toma de distancia de la decisión de la alianza peronista de consagrar a Sergio Massa como candidato de unidad y que en la Ciudad tampoco haya competencia interna. No lo dijo expresamente pero lo sugirió de la siguiente manera:

Se definió que haya lista única y quiero que a esa lista le vaya muy bien, pero como yo pensaba que había que hacer otra cosa preferí no estar. Es un momento muy jodido de la Argentina y hay que lograr que (la política) se trate más de rumbos que de cargos”.

Su anuncio de no competir en los próximos comicios fue a través de un breve spot publicado en las redes sociales, donde no solo aseguró que, a pesar de las críticas, apoyará la lista de unidad de Unión por la Patria (UP), sino que también continuará militando en ese espacio que dirimirá candidato a presidente entre Grabois y Massa, y que compartirá candidatos en el resto de las categorías.

Fernández se había lanzado con Pedro Rosemblat como precandidato a jefe de gobierno porteño para competir en las PASO de la oposición en la ciudad y bajo el lema “Abran PASO”, por el Frente Patria Grande.

Ahora, a pesar de dar un paso al costado en cargos electivos, la diputada sostuvo que a pesar de que el 10 de diciembre próximo continuará “siendo una más” junto al resto de los militantes, nunca se relacionará “pasivamente con lo que pasa en este país”.

En este sentido, adelantó que seguirá trabajando a favor de “una agenda de los incluidos” y debatiendo en la necesidad de “pensar el cambio de rumbo de un gobierno (nacional) que no salió como esperábamos ni queríamos.

“Hay discusiones que las puedo seguir dando en el lugar que esté”, indicó y llamó a “sincerar la discusión política”. El debate político “tiene que ser pragmático” pero para ello “hay que estar convencida, porque no hay nada más potente que un militante convencido”, destacó.

“Milito hace diez años y nunca me voy a relacionar pasivamente con lo que pasa en este país”, agregó y anunció que tiene “buenos planes para lo que se viene”. “El mejor (plan) es el de la militancia política” y el de “atar la vida a los destinos de la patria”.

Luego hizo un breve repaso de su experiencia en la Legislatura porteña. Admitió que su elección de sentarse en una banca tuvo que ver con “animarme a expresar” a su generación y reconoció que “aprendí mucho de los ataques” recibidos por dirigentes del oficialismo macrista, en “una Legislatura que no te permite discutir”.