Los “Leones de Lanús” son un club de beisbol softbol que desde el Polideportivo Eva Perón da un aire distinto al paisaje bonaerense. “Quien conoce el béisbol y siente la adrenalina de pegarle de lleno a la pelota con un bate no se va nunca más”, dice a Buenos Aires 12 Eduardo Schultze, el manager general, director técnico y ex jugador de primera división y , como si fuera poco, Manager general de los Menores de la selección Argentina.

Desde hace más de dos décadas, en el partido de Lanús apenas un alambrado intenta dividir dos mundos, tan parecidos como distintos. Linderos a las canchas de fútbol de una típica liga de barrio, aparece otro terreno, otra cancha con otro tipo de líneas y marcas. Allí, hay algo más de un centenar de personas que parecen estar en otra realidad. En vez de goles y gambetas; hablan de bates, carreras y bases robadas.

Sus vestimentas aparentan ser salidas de una película de TV de sábado a la tarde. Gorras, guantes, remeras amplias con inscripción en cursiva, cascos protectores, algunos con botines especiales y otros con botines de papi futbol.

Por momentos se hace silencio como en una partida de ajedrez. Se analiza, se hacen señas, se estudia. Un bate golpea una pelota que iba a 130 kilómetros por hora y se explota en una frenética carrera de pasión, sudor y locura para llegar a pisar las 4 bases. Hay abrazos, hay festejos , hay puños en alto. Y se vuelve a empezar.

Primer rugido

El club nació en el año 2000. Eduardo había sido jugador y técnico de las selecciones juveniles argentinas, cuando luego de una clínica sobre su deporte en la universidad de Lanús, junto con algo más de veinte personas pensaron en armar el primer equipo que represente al distrito. “El intendente de ese momento Manuel Quindimil nos dio este espacio pegado al velódromo y desde ese día no paramos de crecer”, afirma.

“Hoy tenemos más de 200 deportistas entre todas las categorías, además de jugadores en las selecciones argentinas U23 (Agustín Borrino) y en la U15 (Ismael Sierra). Algunos están jugando en el exterior y anualmente nuestros chicos participan en torneos internacionales en Colombia y Miami”, destaca.

Los Leones compiten en TOP 6, máxima categoría de la Liga Metropolitana de Buenos Aires. Y cuentan con las categorías U10,U14,U17, A3 (mayores, 3era división,) A1 (1era división), Femenino mayores, Escuela de Inicio y Fastball (destinada a adultos que quieren conocer el deporte)

Luego están la A2 y A3, que es una especie de ascenso. El TOP 6 se juega de septiembre a diciembre. Hoy tienen aproximadamente 1200 deportistas federados, integrada no solo por argentinos sino por las migraciones Venezolanas, cubanas y dominicanas que llegaron al país en los últimos años.

Un cartel en la ruta 

Miguel Sierra también fue jugador profesional, y actualmente es coordinador general y técnico de las categorías menores (U10). Es de República Dominicana, pero hace 17 años que vive en el país “vine con la esperanza de poder seguir jugando al béisbol". "Vivía en Capital y un amigo de esta zona me llamó y me dijo que había visto un cartel en Lanús que decía que había un lugar para jugar béisbol”, cuenta a este medio. "En ese momento no había celulares, ni redes, así que vine a preguntar. Conocí a Eduardo y me transformé en coach”, recuerda de inmediato. Para él, el béisbol fue como tener a su tierra "un poco más cerca". 

Sierra cuenta que esta actividad hace “eje en la inclusión” y profundiza: “En el fútbol, para poner un ejemplo, cuando alguien quizá no es tan bueno, queda en la banca hasta que se va, acá, en cambio, todos juegan”. “Obvio que hay competencia y todos queremos ganar, pero buscamos un crecimiento general, no importa tanto la condición atlética de cada uno sino la predisposición de aprender”, añade.

En esa línea, Schultze revela que llegan muchos chicos “marginados” en otros deportes, y que acá “encuentran un lugar donde son parte”. “Quizá uno que no es tan ágil al comienzo es un gran bateador, y nosotros después trabajamos en su parte atlética para que mejore”, cuenta.

Ambos coinciden en el “ambiente familiar y de camaradería” que hay en cada jornada. “El ambiente es totalmente diferente, hay quizá un trato más cordial con el rival, no significa que no pasen cosas, pero menos que en otros deportes, principalmente en las categorías menores, es mucho más social”, explica Schultze

Nacer con bate bajo el brazo

Según señala el Schultze, las migraciones venezolanas y dominicanas de los últimos años aumentaron la competitividad de los equipos en Argentina. "Como nosotros nacemos con una pelota abajo del brazo, en esos países nacen con un guante o un bate", resume el coach argentino. Sierra asiente y completa: “Yo soy de un país donde la gente batea en los campos, en la calle, es otra cultura y fue todo un desafío aprender esa diferencia, pero el argentino es muy competitivo y aprende muy rápido”.

Schultze define al deporte como un juego "apasionante, tanto desde la táctica como desde la técnica". Y lo explica: "Acá cada jugada ,el coach es fundamental porque a base de sus señas guía al equipo. Cuándo ir para un lado, para el otro, cuándo robar base, cuándo tocar la bola, entonces el técnico lo vive mucho, es un juego muy estratégico, en el mundo muchos le dicen el ajedrez humano”.

Nacido en tierras de bate bajo el brazo, el entrenador centroamericano agrega algunas indicaciones: “La forma de agarrar la bola, tiene que ver mucho con la técnica, igual que en el bateo, te va a dar la capacidad de como lanzar la bola, más fuerte, más despacio, más preciso, todo eso se trabaja y se entrena mejorando la técnica y cuando más chicos sean los niños para aprender , mayor facilidad tendrán”.

En la actualidad, Schultze y Sierra no imaginan su vida lejos de Leones, y celebran que el deporte los haya unido "sin importar dónde nació cada uno”. “Es una pasión hermosa, no importa si estas en dominicana, Lanús o Miami, y es algo que vale la pena vivir”, definen.