La actividad industrial registró en enero un incremento de 5,4 por ciento respecto de igual mes de 2009 y una caída de 8 por ciento con respecto al mes anterior, según informó ayer el Indec. La industria automotriz volvió a motorizar el avance de la actividad manufacturera, mientras que la elaboración de alimentos en su conjunto registró un desplome promedio del 3,2 por ciento contra enero de 2009. La utilización de la capacidad instalada del sector fabril, en tanto, se ubicó en el 66,6 por ciento.

La industria automotriz exhibió el mes pasado un incremento del 66,7 por ciento contra el mismo mes de 2009. No obstante, la suba interanual más importante se vio en la elaboración de fibras sintéticas y artificiales (175,4 por ciento). También hubo fuertes mejoras en las manufacturas de plástico, con el 36,9 por ciento, y agroquímicos, con el 31,8 por ciento.

Por el contrario, la molienda de cereales y oleaginosas mostró en enero último una disminución del 13,8 por ciento anualizado y de 20,4 por ciento contra diciembre anterior. Le siguieron caídas interanuales en la elaboración de productos farmacéuticos (-14,2 por ciento) y metalmecánica (-9,2 por ciento). La producción de carnes rojas presentó una merma de 4,5 por ciento, al tiempo que el rubro carnes blancas alcanzó una suba del 1,3 por ciento.

Por su parte, la encuesta cualitativa revela que la mayoría de las empresas no prevé cambios en sus niveles de producción, exportación, importación y cantidad de trabajadores. Las expectativas de las firmas consultadas por el organismo coinciden en un ritmo estable de la demanda interna para este mes (el 86,8 por ciento de los encuestados). El 71 por ciento estima una continuidad en los actuales niveles de exportación; el 79,8 lo espera de las importaciones; y el 95,7 prevé que se mantendrá la dotación de personal.

El Indec informó además que la capacidad instalada de toda la industria se ubicó en enero en 66,6 por ciento de su potencial. Los bloques que presentaron mayor uso fueron refinación del petróleo (92,5 por ciento), productos de caucho (83,4) y sustancias y productos químicos (77,4). En tanto, los que registraron una menor utilización de su capacidad instalada fueron la producción de automotores (37,4 por ciento), metalmecánica (45,5) y productos minerales (65,3). En referencia a la encuesta cualitativa, el 83 por ciento de las firmas tampoco prevé cambios en la utilización de la capacidad instalada.