EL PAíS › LA IGLESIA SE COMPROMETIó A MEDIAR CON EL GOBIERNO NACIONAL

Una promesa por Sala

En una reunión con organizaciones sociales, el obispo Lozano, de la Pastoral Social, dijo que buscará abrir un canal de diálogo.

El obispo Jorge Lozano se comprometió ante organizaciones sociales a intentar abrir un canal de diálogo con el gobierno nacional con el objetivo de propiciar la liberación de Milagro Sala, la líder de la agrupación social Tupac Amaru que sigue detenida. El encuentro se realizó en la sede del Episcopado, donde funciona la Pastoral Social que preside Lozano, para proyectar el armado de un encuentro similar al que se concretó en Bolivia con las organizaciones bajo las consignas “Tierra, techo y trabajo”. En tanto, Sala fue trasladada ayer ante el juzgado de Control 3, a cargo de Gastón Mercau, en el marco de la causa por presunto fraude a la administración pública, asociación ilícita y extorsión, por la que se la investiga junto a integrantes de cooperativas y por la cual está detenida.

El traslado fue para que designara a su abogado defensor, a lo cual la dirigente nombró a Luis Paz, y acto seguido se abstuvo de declarar. Además de conocer el expediente, su abogado pretende que el juez Mercau analice el pedido de cese de detención. Luego de finalizada la feria judicial, se confirmó a ese magistrado al frente del caso, luego de la licencia que solicitó Raúl Gutiérrez, juez que había ordenado la detención de Sala por la causa inicial, en la que fue acusada de instigación a cometer delitos y tumulto por el acampe que lleva 50 días en la Plaza Belgrano de San Salvador de Jujuy. Mercau resolvió el viernes hacer lugar al cese de detención presentado en relación con la primera denuncia, pero luego determinó que la referente de la Tupac Amaru sigue detenida por otra causa que investiga la supuesta administración irregular de fondos destinados a la construcción de viviendas sociales. Así, Sala lleva 17 días detenida en el penal de mujeres de Alto Comedero.

En tanto, unas treinta organizaciones sociales como la CTA Autónoma, la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (Ctep), el Mocase (Movimiento Campesino de Santiago del Estero) vía campesina, la Corriente Clasista Combativa, Barrios de Pie, Libres del Sur, Descamisados, el Movimiento Evita, la Tupac Amaru y Madre Tierra, recibieron el compromiso del obispo Lozano para buscar un encuentro con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, para iniciar un diálogo tendiente a la liberación de Sala. Los dirigentes de estas organizaciones coincidieron en que la líder de la Tupac Amaru es una “presa política”, y escucharon de boca de Lozano algo que luego pudieron verificar: en el ámbito de la provincia de Jujuy los obispos ya habían solicitado una reunión con el gobernador Gerardo Morales, a lo cual el mandatario se negó.

Con cierta esperanza a partir de este compromiso, los dirigentes le hicieron saber a Lozano que se sintieron representados por la nota que publicó en el diario La Nación con el título “Los movimientos sociales bajo sospecha”. En el artículo, el presidente de la Pastoral Social indicó que “el ser humano es social por naturaleza”, recordó que “una gran cantidad de movimientos sociales surgieron en torno a la gravísima crisis institucional de 2001”, y destacó que estas organizaciones son “verdaderas redes que fortalecen el tejido social”.

Compartir: 

Twitter

Milagro Sala continúa detenida.
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.