EL PAíS

El fiscal que acusa a Patti por sus crímenes en la última dictadura

Murray enumeró pruebas contra el diputado electo ante la comisión que analiza su futuro. Dijo que fue sobreseído por presiones.

 Por Adriana Meyer

“Existió un aparato organizado de poder del que participó (Luis) Patti y que significó la muerte de los militantes Osvaldo Cambiasso y Eduardo Pereyra Rossi”, afirmó ayer el fiscal federal Juan Patricio Murray. Y dejó en claro que “esos hechos estaban acreditados en 1983, pero hay pruebas contundentes de que el juez del caso fue presionado para dictar el sobreseimiento de Patti y los otros dos imputados.” Así respondió a los legisladores de la comisión parlamentaria que analiza las impugnaciones contra el aspirante a diputado. “Yo los maté en un enfrentamiento”, había reconocido el represor ante la Justicia en el ’83, en alusión al asesinato de Cambiasso y Pereyra Rossi. La cita fue mencionada por el radical Alberto Becani, quien leyó una entrevista en la que Murray aseguraba que “disfrazaron las muertes con un enfrentamiento cuando se sabe que fueron secuestrados en un bar de Rosario”, y que “Patti admitió haberlos ultimado, ante los jueces (Luis) Milesi y (Juan Carlos) Marchetti”.

La reunión, de por sí, empezó con rispideces cuando, una vez más, los abogados de Patti cuestionaron el proceso que seguramente terminará en su inhabilitación. Rafael O’Gorman le recriminó al presidente de la Comisión de Peticiones, Poderes y Reglamento, Gerónimo Vargas Aignasse, que haya dicho que lo resuelto por la Justicia sobre Patti no importaba en esta ocasión. Entonces el diputado tucumano aclaró: “Si las causas judiciales ayudan son tenidas en cuenta, pero no se trata de que si tiene causas es culpable y si no las tiene es inocente”.

A su turno, el fiscal Murray describió el estado de las dos causas que involucran al ex subcomisario. El expediente sobre el homicidio de Cambiasso y Pereyra Rossi, dijo, terminó con el sobreseimiento de Patti y el de dos agentes “no por inexistencia del hecho ni insuficiencia de pruebas”. Ese desenlace, señaló, quedó firme en 1986 “por el transcurso del tiempo”. Recordó que el año pasado pidió la reapertura de la pesquisa ante el juez federal de San Nicolás, Carlos Villafuerte Ruzo, junto a la Secretaría de Derechos Humanos provincial y a las hermanas Cambiasso. En la investigación sobre el homicidio de Gastón Gonçalves, su esposa y otras cuatro personas, Murray recordó que pidió la indagatoria y detención de Patti, pero el caso está varado en la Cámara.

Ante una pregunta del diputado Remo Carlotto, uno de los impugnantes, el fiscal explicó que hay pruebas nuevas, documentos de la ex Dirección de Inteligencia de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, que acreditan que hubo tareas de inteligencia previas al secuestro de Cambiasso y Pereyra Rossi. La diputada Mirta Pérez quiso saber si Patti aparecía en esos informes. “Con posterioridad al hecho sí aparece Patti con nombre y apellido”, respondió Murray. Otro elemento clave es un informe de la Embajada de los Estados Unidos –que apareció en un proyecto de desclasificación de documentos–, de junio de 1983, según el cual “el abatimiento de los dos hombres no pudo haber ocurrido sin el consentimiento de las altas autoridades militares”. Como reveló este diario, la hipótesis de la fiscalía es que el “golpe o semigolpe” que se estaba incubando según ese documento venía propiciado por un sector del Ejército que pretendía desplazar al presidente de facto Reynaldo Bignone y sus ministros del Interior y Justicia si no cumplían con librar de culpa a Patti y sus agentes. El giro del juez Marchetti, que desprocesó a los imputados que antes había encarcelado, habría descomprimido la situación.

Murray dijo que aquel magistrado tuvo presiones de todo tipo: seguimientos, acusaciones de “izquierdistas” a sus empleados, y el discurso del ex jefe de la Policía Bonaerense Fernando Verplaetsen en el cual atacó la investigación judicial. “Estas nuevas pruebas confirman que ese sobreseimiento no pudo haber sido producto de la libre decisión del juez de la causa”, aseguró. El abogado O’Gorman acusó al fiscal de incoherente en alusión a citas de sus escritos. “Esto no es un examen de derecho, no soy el imputado”, le respondió Murray sin perder la serenidad. Vargas Aignasse tuvo que intervenir para indicarle que esas acusaciones las formule en la Justicia. “La Justicia no sirve para nada, ya lo dijo usted”, volvió a chicanear el letrado.

Compartir: 

Twitter

El fiscal Murray investiga a Patti por crímenes de lesa humanidad.
Imagen: Ana D'Angelo
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.