Para Juan Pablo Cafiero, la relación del Gobierno con el Vaticano “está totalmente recompuesta”. Designado como embajador argentino en Roma con el objetivo de recomponer la ríspida relación con el Vaticano, Cafiero consideró que existen “pequeños logros”. “Fue una buena noticia el diálogo entre la Presidenta y la Conferencia Episcopal, también el acto para recordar los 30 años de la mediación papal por el Beagle. Pequeños logros, pequeños éxitos, que han ido robusteciendo el diálogo entre el Vaticano, la Iglesia argentina y el Gobierno”, indicó. En Buenos Aires, donde participó de la convocatoria del Gobierno a los diplomáticos argentinos, el embajador adelantó, sin embargo, que “todavía está pendiente” definir el futuro status del obispado castrense. El Gobierno, dijo, “está en condiciones de replantear cómo debería ordenarse el servicio religioso” en los cuarteles, pero advirtió que “no queremos que haya una segmentación ficticia entre militares y civiles en la prestación de ese servicio religioso”.