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4 Boca: Orión; Molina, Daniel Díaz, Insaurralde, Silva; Bentancur, Cubas, Gago; Lodeiro; Palacios, Tevez.
DT: Rodolfo Arruabarrena.
1 Newell's: Unsain; Cáceres, Domínguez, Formiliano, Insúa; Advíncula, Mateo, Denis Rodríguez, Maxi Rodríguez; Scocco, Boyé. DT: Juan Pablo Vojvoda.
Goles: PT: 37s Bentancur (B), 5m Tevez (B) y 36m Insaurralde (B). ST: 11m Maxi Rodríguez (N) y 27m Palacios (B).
Cambios: ST: Desde el inicio D'Angelo por Unsain y Mugni por Scocco (N), 15m Pablo Pérez por Gago (B), 31m Chávez por Tevez (B), 36m Meli por Cubas (B) y Formica por Advíncula (N).
Arbitro: Fernando Espinoza.
Cancha: Boca.

Lo visto de Newell's en el Coloso ante Racing, el pasado miércoles, no representa en verdad la realidad del equipo. Lo visto anoche en la Bombonera, ante Boca, se aproxima más al presente de desconcierto que reina en los leprosos. Los rojinegros se vieron desbordados por la propuesta de local, sufrieron un gol en su arco a los pocos segundos del partido y a los pocos minutos la caída ya tenía diferencia de dos. La derrota, claro, al final por fue goleada 4 a 1, con descuento de Maxi Rodríguez, desparramando Newell's una imagen lastimosa de un equipo que reclama cambios con urgencia y la dirigencia dejará al plantel en manos del técnico Diego Osella.

Cuando Newell's tocó la pelota, el partido ya lo perdía por 1 a 0. Sacó Boca del medio, hizo posesión del balón en campo leproso, encontró espacios en un desborde de Palacios, Cubas sacó un centro bajo al área llena de defensores leprosos, pero la pelota le llegó a Bentancur y puso al xeneize en ventaja con fuerte derechazo a la carrera.

Sacó Newell's del medio aturdido por la situación e intentó recomponerse. Pero a los cinco minutos la formación leprosa volverá a encontrarse en su campo para iniciar el juego desde el círculo central. Esta vez porque Tevez anotó el segundo con un tiro libre desde la izquierda ejecutado de derecha y al medio del arco que se le coló a Unsain, quizá perjudicado por una mala visión.

No se había jugado casi nada y Newell's ya tenía el partido lejos en el marcador. Y lo pudo haber tenido aún más comprometido si no le hubiesen cobrado posición adelantada a Palacios cuando marcó el tercero al colarse entre los centrales rojinegros. El pésimo comienzo de la Lepra tenía dos claves: Newell's no encontraba la pelota y la defensa jugaba parada.

Newell's jugó el partido siguiendo la pelota, es decir a merced de lo que proponía Boca con su dominio. La pasividad de los rojinegros dejaban fuera de acción a sus delanteros. Porque mientras en el local la tocaban todos en cada avance, y el que más daño hacía era Palacios, en la Lepra los intentos eran solo de Denis Rodríguez.

Sin la pelota, sin alguna idea, no encontrará Newell's ninguna opción de gol en el área de Orión. Lo inevitable llegó a los 36 minutos, cuando Silva recibió un tiro de esquina pasado y señaló el tercero al rematar cruzado de zurda, en pelota que se desvió y descolocó a Unsain. Boca brillaba en cada ataque y disminuía a Newell's. Tanta era la diferencia que el árbitro decidió dar por terminado el primer tiempo cuando Unsain sufrió un rodillazo de Tevez en la cabeza al desviarle un mano a mano. El arquero leproso quedó aturdido, requirió atención médica por algunos minutos y todos se fueron al descanso.

El segundo tiempo sirvió para tomar nota del orgullo de Newell's. Sin Scocco y con Mugni, el equipo de Vojvoda se esforzó más por equilibrar el trámite del juego, en ese lapso logró jugar con la pelota y llegó al descuento. Boyé tocó abierta a la izquierda y a la carrera Maxi Rodríguez remató con pie abierto al segundo palo para dejar a Orión revolcado en el césped y la pelota frenada por la red.

Fue un tiempo de descuidos para Boca. Porque antes de que la Lepra se ponga a la tarea de soñar con un nuevo descuento, el xeneize volvió a dominar a voluntad y sus dos mejores jugadores en cancha se insperaron para anotar el cuarto: Tevez tiró una gambeta larga en el área y tocó atrás para que la empuje Palacios, en un arco que tenía el debut de D'Angelo para suplir al lesionado Unsain.

Newell's estuvo de paseo por la Bombonera. El problema quedará ahora en manos de Diego Osella.