La discusión por la coparticipación continúa generando tensiones entre Ciudad y Nación. Luego de que el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se negase a participar de una reunión convocada por el Ejecutivo para tratar el tema de la asignación de fondos por el traspaso de la policía, el Frente de Todos emitió un duro comunicado calificando su negativa a dialogar como algo "inexplicable". Por otro lado, el gobierno nacional, a través del Ministerio de Interior y el Ministerio de Economía, respondió al rechazo de Larreta insistiendo en la necesidad de llegar a un acuerdo y lo invitó a un nuevo encuentro para el lunes a las 15 horas.   

"La Ley 27.606 subsanó la ilegalidad con la que Macri traspasó por decreto la Policía, mejorando la calidad institucional de la autonomía porteña. Además, fijó un ámbito de diálogo para establecer en forma trasparente los recursos correspondientes a esa transferencia", publicó  en sus redes sociales el ministro de Interior, Wado de Pedro, haciendo referencia a la Ley sancionada por el Congreso en diciembre que eliminaba el excedente de recursos que Mauricio Macri le había cedido, por decreto, a la Ciudad de Buenos Aires en el 2016 con el traspaso de la Policía. "Es la forma de respetar nuestra Constitución, la ley y la posición de todas las provincias. Por eso, lamentamos que el gobierno de la Ciudad no quiera participar de este ámbito de consenso para alcanzar un acuerdo definitivo y resolver el problema que ellos mismos generaron", disparó De Pedo, quien unos días antes había convocado, junto al Ministerio de Economía, a Rodríguez Larreta a participar de una reunión que limase las asperezas. Una invitación que fue rechazada por el gobierno de la Ciudad.

"Nos vemos impedidos de concurrir a la reunión propuesta según lo establecido por el artículo 2° de esta ley ya que hemos planteado judicialmente la inconstitucionalidad de la misma", había expresado Horacio Rodríguez Larreta el sábado a través de un escrito dirigido hacia los ministros de Interior y Economía. Rodríguez Larreta, que ya había denunciado la inconstitucionalidad del recorte del exceso de fondos ante la Corte Suprema en dos ocasiones, volvía a manifestar así su rechazo a perder ese 1,18 por ciento de aumento que Macri le había otorgado discrecionalmente en el 2016 cuando asumió la presidencia. Frente a esta respuesta, sin embargo, el gobierno nacional replicó con una nueva convocatoria para este lunes: "Reiteramos la invitación a un diálogo de buena fe, sobre la base del respeto a las instituciones, y convocamos nuevamente al Señor Jefe de Gobierno a una reunión preliminar a celebrarse el lunes 4 de enero del 2021 a las 15 horas en el Salón de los Escudos", rezaba la misiva firmada por De Pedro y Guzmán. La carta insistía en que "no hay mayor estándar de legalidad e institucionalidad que convocar a una reunión formal en el marco de una ley que ha sido debatida y sancionada como demanda la Constitución Nacional" y rectificaba la voluntad del gobierno nacional de "trabajar en conjunto con todas las provincias del país y la Ciudad de Buenos Aires sobre la base del diálogo y la responsabilidad".

Por otro lado, el bloque de legisladores y legisladoras porteñas del Frente de Todos publicó también un comunicado cuestionando el "inexplicable rechazo" efectuado por Rodríguez Larreta ante la convocatoria del Poder Ejecutivo. "El Jefe de Gobierno insiste en transformar un tema estrictamente institucional -ordenar definitivamente el marco de la transferencia de la Policía Federal efectuada en 2016 de forma defectuosa por Mauricio Macri- en un conflicto político. De esta forma, nos impide a los porteños y porteñas alcanzar un acuerdo permanente y con fuerza de ley, que defina las partidas presupuestarias correspondientes a dicha transferencia, conforme lo previsto por el artículo 75 inciso 2 párrafo 5 de la Constitución Nacional", se quejaron les legisladores porteños.

A su vez, desde el Frente de Todos remarcaron la invalidez de utilizar como argumento para el rechazo al diálogo la judicialización llevada adelante por el Gobierno de la Ciudad "dado que --en modo alguno-- ha existido condicionamiento para dicha convocatoria, ni implica renuncia alguna a la acción judicial". "El rechazo al diálogo nunca es una opción, menos aún cuando se trata, ni más ni menos, que de lograr un acuerdo sobre números que están sobre la mesa y que sólo hay que analizar. Esperamos que el Jefe de Gobierno revise esta decisión incomprensible y vuelva al camino de la racionalidad y el diálogo democrático", finalizaron. La pelota, de momento, está en la cancha del jefe de gobierno porteño.