Son mujeres, tan fuertes y desafiantes como sus colegas masculinos. Son minoría en el Dakar, pero no por eso se contentan con cumplir un rol secundario: se divierten tanto como los machos que desafían a la Patagonia y hasta se dan el gusto de ganar parciales, como el caso de la sueca Tina Thorner, la navegante del príncipe qatarí Nasser Al-Attiyah, que a bordo de un BMW X-3 está peleando la prueba con el español Carlos Sainz. Pero Thorner, tercera en la edición de 1999 navegando a la alemana Jutta Kleinschmidt (que ganara la edición 2001) no es la única intrépida de la fatigosa prueba.

Con 1,62 metro de altura y 54 kilos, la francesa Annie Seel puede ser pequeña en tamaño, pero no ciertamente en determinación. A bordo de su moto KTM nº 93, esta cuarentona francesa alimenta su pasión. “Todas los raids son mi debilidad –cuenta–. Probé cualquier cosa en moto y empecé a correr rally-raid en 2000 cuando tenía 32 años. Me siento una mujer en un mundo de hombres, pero lo mejor es que me gané el respeto, ¡especialmente de aquellos a los que paso en el camino!”

Esa pasión ya había traído a Seel a estas tierras. “Corrí el Rally por las Pampas en 2005, pero no había tanto polvo como en este Dakar. Mi problema es que no soy alta con las piernas cortas, cuando atravieso el fesh-fesh (zonas de arena muy fina en las que hay que andar despacio) estoy en desventaja.”

Annie tiene un sueño: “Terminar entre los primeros 30. Si no me caigo, si no me lastimo, si no se me rompe nada en la moto, creo que mi sueño puede hacerse realidad”. Por ahora marcha 61ª, a 4h38m del líder Marc Coma.

Thorner, nacida en Suecia en 1966, vive en Suecia y navega rally desde los 18 años. “Mi novio de entonces, Lars-Erik Torph. era piloto de rally y empecé a ayudarlo. Me gustaban más los caballos y los aviones, pero un día su navegante se enfermó y así empecé mi carrera”, cuenta. “Ya ganamos dos etapas con Nasser Al-Attiyah, es mágico. Es un gran piloto y un chico adorable: me trata como una dama y me respeta como navegante. Con él no tengo que ser ruda, basta con ser yo misma.”

La sueca, que en su país da charlas de motivación y conduce su propio show de TV, está entusiasmada con el Dakar y no sólo por la posición expectante que ocupa en la clasificación de la prueba. “El Dakar empezó brillantemente para mí. Amo este país, porque son todos muy entusiastas y eso es conmovedor.”

Si la Thorner está arriba de todo, la italiana Camelia Liparoti no puede decir lo mismo, aunque eso no le quita el entusiasmo. Entre las 21 máquinas arribadas ayer a Neuquén, la suya era la 21ª... a más de 13 horas del puntero Declerck.

Liparoti sabe lo que es duro: en el rally-raid de Egipto del 2008 se rompió la muñeca izquierda. “Todavía no me rehabilité al ciento por ciento”, confió la piloto de 1,60 metro de estatura. “Tengo que compensar esa desventaja con fortaleza mental”, asegura.

Como Thorner, la Liparoti también conocía la Argentina. “Vine en febrero pasado a correr el Enduro del Verano, en las dunas de Pinamar. Me gustan la atmósfera y el clima aquí, y el aliento de la gente me da fuerzas para tratar de llegar al final.”

En cambio, Elisabeth Kraft, que marcha séptima entre los cuatriciclos (justo detrás del argentino Marcos Patronelli), no conocía la Argentina. “Si no hubiera sido por el Dakar, jamás habría venido, pero estoy encantada de estar aquí porque esto es maravilloso y estoy fascinada por el recibimiento en la ruta.” Kraft, campeona francesa de jet-ski, descubrió los cuatriciclos en el desierto de Túnez gracias a su marido Pierre. “Yo quería seguir compitiendo, así que pasé del jet-ski a esto. Juntamos sponsors y vinimos. El primer día dije: ‘Esto es bárbaro’ pero el segundo, con ese enlace de 600 kilómetros hasta Madryn, fue muy duro, terminé destruida”. Kraft asegura que entendió la filosofía del Dakar: “Es una prueba en la que no hay tiempo para pensar. Sólo se necesita seguir andando, manejando, mirando el road-book, duchándose, durmiendo... ¡pero nunca deteniéndose!”.

La clasificación general

Buenos Aires-Neuquén (4 etapas)

Motos: 1º Marc Coma (KTM), 14h41m21s

Camiones: 1º De Rooy-Colsoul-Van Mells (Ginaf), 15h16m41s

Cuatriciclos: 1º Christophe Declerck (Yamaha), 19h14m51s