Mientras Israel negocia una tregua con Hamas, la operación Pilar Defensivo entró en su sexto día: los bombardeos israelíes sobre Gaza elevaron a 108 el número de muertos y a 900 heridos, según el portavoz del Ministerio de Sanidad de Hamas, Ashraf al Qedra. En la ciudad de Ashkelon, ubicada a doce kilómetros de Gaza, las informaciones sobre un posible alto el fuego llenaron las radios y diarios, pero las calles, tiendas y cafeterías estaban notablemente despobladas en una jornada en la que fueron lanzados contra la urbe 14 cohetes, sin causar heridos. Once de esos proyectiles fueron interceptados por el sistema israelí de antimisiles Cúpula de Hierro, causando un notable estruendo. Pero uno de los restantes cayó en el patio de un colegio, que se encontraba vacío porque las clases están suspendidas desde que comenzó la ofensiva sobre la Franja.

En una escalada de su campaña, Israel bombardeó casas de líderes de Hamas, el grupo islamista que gobierna en Gaza, causando un aumento de las víctimas civiles. El Ministerio de Salud informó que al menos 30 palestinos murieron ayer por nuevos ataques israelíes y que la cifra total de víctimas fatales dentro del enclave costero trepó a 108, incluyendo 24 niños y 10 mujeres, desde el inicio de la ofensiva, el miércoles pasado. Por segundo día consecutivo, misiles israelíes alcanzaron un edificio que alberga a medios de prensa, entre ellos el canal de Hamas, Al Aqsa TV, y al menos dos personas murieron en el ataque, uno de ellos un civil y el otro un líder de Jihad islámica, informaron fuentes médicas y ese grupo palestino. Los cuerpos de cinco mujeres y cuatro niños de una misma familia muertos anteayer en un ataque israelí fueron enterrados en el Cementerio de los Mártires, informó la agencia de noticias palestina Maan. Rescatistas aún buscan entre los escombros de la casa de los Al Dalou a dos adolescentes integrantes de la familia.

Mientras tanto, la comunidad internacional se esforzaba por lograr un alto el fuego que evite una invasión terrestre. Las posibilidades están, en palabras de un comentarista de la radio pública israelí, en un 50-50, es decir, con idénticas posibilidades de que la tregua se haga realidad o que las tropas israelíes penetren en la Franja, como sucedió hace cuatro años en la Operación Plomo Fundido, en la que murieron unos 1400 palestinos, en su mayoría civiles.

Según una encuesta del diario Haaretz, esta última opción cuenta con el 30 por ciento de adhesión en la opinión pública israelí, que en cambio apoya la operación Pilar Defensivo de forma abrumadora (84 por ciento) y elevó a veinte puntos la popularidad del primer ministro, Benjamin Netanyahu, y el titular de Defensa, Ehud Barak.

La alternativa de un acuerdo bajo mediación internacional, que se intenta alcanzar desde varios frentes con creciente ahínco, tiene que traer a Israel años sin cohetes y no una tregua que dure una semana, subrayó en Ashdod el ministro de Diplomacia Pública israelí, Yuli Edelstein.

Por su parte, Egipto espera que Israel y Hamas alcancen una tregua en las próximas 72 horas, según una fuente de los servicios secretos egipcios que pidió el anonimato. La fuente explicó que hay un acercamiento entre los dos bandos respecto de la propuesta de alto el fuego presentada por una delegación israelí al cuerpo de inteligencia egipcio. Responsables de los servicios secretos egipcios se reunieron ayer con una delegación de Hamas, encabezada por su líder, Jaled Meshal, y consiguieron acercar los puntos de vista entre la postura de Hamas y la citada propuesta de tregua israelí.

Pese al acercamiento, Meshal planteó una serie de condiciones, que la fuente no precisó y que serán presentadas por los mediadores egipcios a la parte israelí. La fuente egipcia apuntó que los preparativos se desarrollan de forma positiva y que la mayoría de las discusiones se centran en las garantías para mantener el alto el fuego sin que ninguna parte lo viole.

Sobre la posible tregua, Meshal aseguró desde El Cairo que es Israel quien pidió el cese de las hostilidades y no su grupo y que no aceptarán ninguna condición israelí. “Quien ha empezado la guerra tiene que frenarla, y la tregua tiene que llegar con nuestras condiciones”, destacó el líder de Hamas, que agregó que Israel tiene que detener los bombardeos sobre Gaza.

A la masacre desatada sobre Gaza se suma la muerte en Cisjordania de Rusti Mahmud Hasan al Tamimi, de 28 años. Según Hahmed al Bitaui, director general del hospital de Ramalá, citado por la agencia oficial palestina Wafa, el joven palestino llegó muy grave el sábado al centro médico, con heridas de bala, tras participar en una manifestación en Nabi Saleh contra la ofensiva sobre Gaza. Se trata del primer muerto palestino en ese territorio desde que comenzó la operación Pilar Defensivo.

La agencia Maan indicó que, según manifestó el comité popular de Nabi Saleh, el joven fue herido en el estómago y en el muslo por disparos de bala durante los enfrentamientos entre los manifestantes y las fuerzas de seguridad israelíes tras la protesta en esa localidad cercana a Ramalá. El comité aseguró que Tamimi, que era oficial de la policía palestina, fue “dejado en el suelo tras haber recibido un disparo desde corta distancia” y que “las fuerzas israelíes amenazaron a los ciudadanos que intentaron ofrecerle los primeros auxilios. Los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad israelíes y manifestantes palestinos en las protestas en distintos puntos de Cisjordania contra la ofensiva israelí en la Franja de Gaza causaron 55 heridos, según Maan.