El presidente de México, Enrique Peña Nieto, resaltó ayer la relación de confianza que se está construyendo con EE.UU., tras recibir al vicepresidente de ese país, Joe Biden, con quien analizó una amplia agenda de cooperación que dejó de lado el escándalo por las revelaciones de espionaje de Washington a gobiernos latinoamericanos.

“Sea usted bienvenido a nuestro país. Deseamos que ésta sea una instancia fructífera, positiva para ambas naciones, y como siempre sabe que está usted en su casa”, resaltó Peña Nieto durante la conferencia de prensa que ofreció con Biden al concluir la visita. Tanto Biden como Peña Nieto señalaron que el objetivo del encuentro fue buscar caminos para ampliar la cooperación entre ambos países, con una agenda amplia y diversa, que vaya más allá de los temas de seguridad.

Ni Peña Nieto ni Biden se refirieron al espionaje durante un mensaje que dieron ante la prensa después de su reunión, en el que no se admitieron preguntas. Según documentos hechos públicos a partir de revelaciones del ex técnico de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) Edward Snowden, Estados Unidos espió a Peña Nieto antes de su toma de posesión en diciembre como presidente. La reacción del mandatario mexicano ante este escándalo fue contrastante con las de sus otros colegas latinoamericanos también espiados, como la mandataria brasileña Dilma Rousseff, que aplazó una visita a Washington prevista para octubre por esta razón.

Peña Nieto recibió a Biden para una reunión privada en la residencia oficial de Los Pinos, después de que el vicepresidente asistiera en la Secretaría de Relaciones Exteriores a la apertura del Diálogo Económico de Alto Nivel entre México y EE.UU., mecanismo de cooperación acordado en mayo durante una visita del presidente Barack Obama a México. El mandatario mexicano afirmó que la puesta en marcha del diálogo económico y la importante comitiva que acompañó a Biden dejaron “muy en claro” la visión de ambos gobiernos de profundizar la relación en un marco “de respeto, de cordialidad, de fraternidad, de amistad y de confianza”.

Biden reconoció la agenda de reformas que impulsa Peña Nieto en México y su decisión de tomar estos “difíciles, pero importantes pasos”, y expresó su solidaridad a México por los daños causados por dos tormentas que dejaron un centenar de muertos y devastación.

Biden aseguró que Estados Unidos está profundamente interesado en hacer madurar aún más la relación con México. “No hay razón por la que Norteamérica no pueda ser la región más dinámica del mundo”, afirmó.