Al asumir el miércoles pasado, Caló tuvo un discurso en clara defensa del modelo kirchnerista y en ese tono explicó: "A veces me preguntan por qué uno es oficialista. Yo soy oficialista de este modelo". Por eso, señaló que los reclamos que lleva adelante la centra que él encabeza "serán con prudencia", postura que respaldó el ex socio político de Moyano, el taxista Omar Viviani. A diferencia, de ambos dirigentes, el titular de Luz y Fuerza, Oscar Lescano, amenazó hoy con un paro para esta semana.

El flamante secretario general, en diálogo con Buenos Aires Noticias, informó que en la reunión de mañana los dirigentes antimoyanistas conversarán con la Presidenta "para ir articulando los petitorios y la agenda que tiene la CGT". Y volvió a reivindicar lo alcanzado en los últimos años: "Antes no podíamos discutir salarios y ahora los salarios de los metalúrgicos crecieron 1200 por ciento", ejemplificó.

Durante la reunión se espera que la delegación sindical le entregue a Cristina un documento de cinco páginas, al que adhirieron los 102 sindicatos que conforman la central, con demandas por mejoras salariales e impositivas, y en la que se exige el pago de la deuda que el Estado mantiene con las obras sociales sindicales.

El encuentro, que está previsto a partir de las 18.30, es un gesto de la jefa del Estado para dejar en claro que para el gobierno el interlocutor válido del movimiento sindical, que se encuentra dividido, es el que conduce Caló.

Desde la conducción antimoyanista se intenta mostrar que la reunión implicará la puesta en marcha de "la relación institucional con el Ejecutivo" y esperan que pueda tratarse con la presidenta reclamos que comparten con el sector conducido por el camionero Hugo Moyano.