La credibilidad de las instituciones financieras internacionales está de capa caída. Ayer fue el turno del banco de inversión JP Morgan, que fue multado por 48,2 millones de dólares por perjudicar con prácticas irregulares a sus clientes. Días atrás, otra importante entidad del sistema, la calificadora Moody’s, tuvo un fuerte revés al verificarse que las fallas en su sistema de análisis indujeron a sus clientes a invertir en papeles atados a activos hipotecarios “basura”. Para hoy está prevista la reunión de los titulares de Hacienda y banqueros centrales del G-20, de la cual participará el ministro de Economía argentino. Amado Boudou criticará los planes de ajuste que están aplicando los países europeos en línea con las recomendaciones del FMI.

La autoridad británica de servicios financieros (FSA, en sus siglas en inglés) impuso una multa record de 48,2 millones de dólares a JP Morgan Securities, una rama del banco de inversión, debido a que no separó el capital de sus clientes del suyo como entidad. Violó la normativa vigente en Gran Bretaña, que protege al usuario para que no se vea perjudicado en caso de insolvencia de la entidad. Es la penalización más alta que aplicó la FSA. Londres es la plaza desde donde opera la mayor parte de los fondos buitre que actúan en la Unión Europea.

“Esta multa envía un claro mensaje a las empresas de todos los tamaños para que se aseguren de que el dinero de sus clientes es segregado según la normativa de la FSA”, explicó la directora del departamento de delitos financieros de la entidad, Margaret Cole. “Las compañías deben sentarse y tomar nota de esta medida; tenemos varios casos más en la lista”, amenazó.

El JP Morgan confecciona el indicador de riesgo país, que usualmente los grupos financieros utilizan para evaluar la “credibilidad de la economía” y la capacidad de repago. Otra entidad que recibió un golpe fue Moody’s, la calificadora de riesgo más antigua del mercado estadounidense. Ex empleados de la agencia denunciaron que sus recomendaciones respondían a los intereses de los banqueros que emitían los títulos a evaluar.

La regulación del sistema financiero mundial está entre los temas a tratar en la cumbre del ministros de Economía y banqueros centrales que comienza hoy en Corea del Sur, pero los intereses de los gobiernos más ligados al capital financiero impiden llegar a una resolución. Una opción sería crear un impuesto global a los bancos.

En el convite, Boudou planteará la postura argentina frente a los gigantescos paquetes de ajuste. “Vamos a decir que estas medidas que están encarando (los países europeos) no son las adecuadas”, anticipó. La cumbre es preparatoria del encuentro presidencial del 26 y 27 de este mes en Toronto, Canadá.