Gobierno de unidad

Las autoridades libanesas formaron ayer un gobierno de unidad nacional, tras diez meses de parálisis política en el país. El mismo será encabezado por Tamam Salam, quien aseguró que el gobierno, del que participan en partes iguales tanto los partidos prosirios cuanto los prooccidentales, estará libre de las restricciones del sectarismo religioso con el objetivo de reactivar el diálogo nacional. Salam fue nominado en abril pasado, pero las profundas divisiones persistentes sobre el conflicto en la vecina Siria entre el partido-milicia chiíta Hezbolá y el bloque liderado por sunnitas del ex primer ministro Saad Hariri retrasaron la formación de gobierno. El nuevo Ejecutivo tendrá como objetivo prioritario neutralizar los efectos colaterales de la guerra civil siria, luego de que la participación de milicianos de Hezbolá del lado de las tropas del gobierno de Bashar al Assad provocara amenazas por parte de grupos libaneses sunnitas, así como de rebeldes sirios.

No hubo acuerdo

La segunda ronda de negociaciones de paz en Siria, mediadas por el enviado especial de la ONU y la Liga Arabe, Lakhdar Brahimi, concluyó ayer bloqueada por diferencias irreconciliables entre el gobierno y la oposición y sin una fecha definida para la celebración de un tercer encuentro. Al anunciar el fin de esta segunda tanda iniciada el lunes, que siguió a una primera entre el 24 y el 31 de enero, Brahimi pidió disculpas por defraudar las “muy altas esperanzas del pueblo sirio de que algo ocurriría aquí”, según dijo en declaraciones en las que lamentó los escasos avances. El mediador dijo que ambas partes, el gobierno de Bashar al Assad y la oposición –representada en estas negociaciones por la Coalición Nacional Siria, Cnfros– necesitan retirarse, reflexionar y volver dispuestos a comprometerse seriamente. La profunda diferencia sobre el orden que debe seguir la agenda de las conversaciones –para el gobierno debe ser la violencia terrorista, y para la oposición la conformación de un gobierno de transición– minó hasta ahora cualquier posibilidad de acuerdo.