Sudán acusó ayer a Israel de haber bombardeado una planta militar en Jartum, causando dos muertos, 18 meses después de haberle atribuido la autoría de un ataque en Puerto Sudán. “Creemos que Israel llevó a cabo el bombardeo”, declaró el ministro de Cultura e Información, Ahmed Bilal Osman, durante una conferencia de prensa. “Nos reservamos el derecho de responder donde y cuando decidamos”, advirtió.

El martes por la noche se produjeron una serie de explosiones y un incendio en la fábrica militar de Yarmuk, en el sur de la capital sudanesa, informaron testigos y un medio de comunicación progubernamental. Según el ministro de Información, cuatro aviones participaron en el ataque. Entre los restos de los explosivos se hallaron pruebas que apuntan a Israel como autor del ataque, aseguró.

A primeras horas de la noche, unas 300 personas se reunieron cerca de la sede del gobierno agitando pancartas que pedían la desaparición de Israel. “El ejército de Mahoma regresa”, gritaban. El ministro Osmán explicó que la fábrica de Yarmuk produce “armas tradicionales” y que “el ataque destruyó una parte de la infraestructura del complejo, mató a dos personas en el interior e hirió gravemente a una tercera”. En Israel, el Ministerio de Relaciones Exteriores y las fuerzas armadas se negaron a hacer comentarios.

En abril de 2011, Sudán acusó al Estado hebreo de estar detrás del misterioso ataque aéreo contra un vehículo que había causado dos muertos en Puerto Sudán. Israel no había hecho ningún comentario. Un ataque similar con aparatos extranjeros tuvo como blanco en enero de 2009 a un convoy de armas en el este de Sudán.