La mezcla es explosiva: cortina de humo, oscuridad nocturna, ruta y una supuesta urgencia que encubre el ansia por caminar a tientas por una cornisa. Ayer, una muerte bizarra se agregó a los efectos del listado de víctimas de la ceguera. Un choque en cadena, en el que participaron cuatro camiones, dos camionetas y un auto, terminó con la muerte del conductor de uno de los camiones que se incrustó en el acoplado de otro. Bizarra la situación porque los siete encadenados formaban parte de un grupo de 15 conductores que habían decidido, espontáneamente, saltear el bloqueo que la Gendarmería había organizado en la Ruta 9 a la altura de Fighiera, tomar por un camino vecinal y retomar la 9 frente a San Pedro y muy cerca de donde ocurrió el primer accidente en cadena, el 9 de abril pasado. La muerte de Daniel Tizzi, así se llamaba el conductor fallecido, y otros dos choques, con heridos, en la misma zona y por eludir los vallados, confirmaron que existe la errónea suposición de que andar por una ruta atravesada por el humo es más seguro que avanzar al tanteo por una cornisa, de noche y con los ojos vendados.

Apenas pasadas las 6 de la mañana, una sucesión de vehículos decidió saltear el retén que había dispuesto Gendarmería con la colaboración de Vialidad Nacional en la Ruta 9 poco antes de San Pedro, en dirección Rosario - Buenos Aires.

“La ruta tenía el tránsito asistido –aseguró Ernesto Arriaga, vocero de Vialidad Nacional, en referencia a los operativos de Gendarmería para controlar el tránsito en la ruta–. La Gendarmería corta, espera que se acumule una cantidad de vehículos y después inicia el cruce de la zona de visibilidad restringida con la camioneta de Gendarmería adelante, seguida por la cola de vehículos, a una velocidad que nunca supera los 40 kilómetros por hora.”

El método lleva tiempo, pero, paradójicamente, está organizado para no perderlo. Alrededor de las 6 de la mañana –algunos, puntillosos, aseguran que a las 6.05–, un grupo de unos 15 vehículos tomó la decisión que jamás debiera haber tomado, saltear el control de Gendarmería con la errónea idea de recuperar el tiempo que supuestamente perdería en semejante trámite. Ya se había presenciado a conductores, entrevistados en pleno corte por las cámaras de televisión –en oportunidad del segundo accidente en cadena que dejó cuatro muertes–, asegurar que “éste es un país libre y rige el libre tránsito” o “yo decido de qué manera voy a morir”.

Ayer, un grupo de 15 conductores decidió saltear el control de Gendarmería en Fighiera, eludir la demorona detención de los gendarmes y avanzar por un camino lateral. El trayecto fue realizado sin complicaciones.

Los problemas se iniciaron al recuperar la Ruta 9, a la altura del río Tala, que cruza la 9 pasando San Pedro.

El camión Fiat Iveco, patente GPO 137, con semirremolque, se incrustó en el acoplado de otro camión, de los supermercados Coto, que había detenido o reducido su marcha. El conductor del Fiat Iveco, Daniel Tizzi, quedó atrapado en la cabina destrozada. Otras dos personas, que viajaban en un Fiat Palio, resultaron gravemente heridas, y fueron trasladadas al hospital de San Pedro, junto con otros dos heridos que viajaban en una camioneta. Sufrió heridas leves Fernando Javier Quispe, de 42 años, conductor de una camioneta Ford Eco, su hijo de 7, su esposa y su madre.

“Muchas veces la ansiedad de algunos conductores hace que ocurran estos accidentes que no tienen ningún sentido porque cuando se corta la ruta se hace para evitar que haya accidentes y más muertes”, subrayó el ministro de Interior, Florencio Randazzo. “Veníamos evitando estos accidentes trabajando en forma conjunta con Vialidad Nacional, con Gendarmería y con las policías provinciales.”

Momentos después de que los siete vehículos terminaran de incrustarse unos contra otros, llegaba al lugar el auto guía de la Gendarmería con la columna de autos que supuestamente habían perdido el tiempo en el retén. Mauro Arregui, un policía que había alcanzado el lugar del accidente momentos antes, aseguró que había tal humareda que le resultó muy difícil llegar al lugar. Arregui dijo asombrado que “la gente no paraba de circular por la ruta en esas condiciones”. Otros dos choques, ocurrieron en la misma ruta y en la misma zona. Uno de ellos, a las cinco de la madrugada, a la altura de Zárate, dejó gravemente herido al conductor de una camioneta que también había salteado un control de prevención.