SOCIEDAD › DESTRUYEN PAREDES Y ROBAN DOCUMENTOS Y COMPUTADORAS EN LA SEDE DE LA FUBA

Un ataque más que sospechoso

La conducción de la entidad estudiantil vinculó el episodio a sus denuncias sobre una red de trata que estaría operando en la zona de la plaza Houssay, donde convergen cinco facultades. Aseguran que allí hay una zona liberada protegida por la policía.

El local central de la Federación Universitaria de Buenos Aires sufrió el robo de documentación, balances contables y computadoras, y la destrucción de algunas paredes. La conducción de la entidad vinculó el ataque a las denuncias que viene realizando sobre el funcionamiento de redes de trata y una zona liberada en los alrededores de la plaza Houssay, donde hay cinco facultades y por la que circulan miles de estudiantes por día. El mes pasado, una alumna de Medicina fue secuestrada allí: fue llevada a punta de pistola y subida a un auto, pero fue liberada cuando logró pedir ayuda por mensaje a su madre. En ese momento, según la víctima, había ocho policías en el lugar.

“Derrumbaron una pared, revisaron todo y se llevaron papeles, balances contables y documentación. Solamente robaron tres computadoras; cuando había otros elementos de valor (cámaras fotográficas y electrodomésticos) que estaban en su lugar, por eso pensamos que se trató de un ataque para conseguir información”, contó Julián Asiner, copresidente de la FUBA por el Partido Obrero.

El hecho que motorizó la campaña de denuncia por redes de trata en la zona se debió al caso de una estudiante de la Facultad de Medicina, ubicada frente a la plaza Houssay, que el sábado 16 de julio a las 12 del mediodía fue introducida en un auto a punta de pistola. La estudiante, que salía de rendir un examen final, logró mandarle un mensaje de texto a su mamá: “911”. Los secuestradores se dieron cuenta y, según la víctima, luego de discutir qué hacer con ella, la golpearon y la soltaron.

Adrián Lutvak, copresidente de la federación por La Mella, dijo a Página/12 que ese intento de secuestro “no fue un hecho aislado”, sino que es parte de “la zona liberada que mantiene la policía, que es responsable y cómplice”.

El robo que sufrió el local, ubicado en Uriburu y Paraguay, a metros de la plaza Houssay, fue para Lutvak “un ataque, porque se trata de una organización gremial; y se da en el marco de las denuncias que estamos realizando”. Para el referente de La Mella resulta “incomprensible” que el robo haya sido en un “horario donde existe presencia policial (ocurrió entre las 21.30 y 22.30 del martes pasado) y con varios edificios de la universidad que siguen funcionando a esa hora”.

Desde la FUBA ya le solicitaron una reunión al rector de la UBA, Alberto Barbieri; también pedirán una audiencia con el Gobierno de la Ciudad. “Hay que exigirle al poder político –afirmó Lutvak–, por eso hacemos pública esta situación, son ellos quienes pueden modificarla.” El dirigente se mostró además en contra de solicitar “más policías”, ya que a su entender “son el problema”. Exigió “que se desmantelen las complicidades que permiten la existencia de las redes de trata y zonas liberadas”.

Otra queja del estudiantado es la frecuencia con la que sufren robos cuando salen de cursar, “sobre todo de noche”; una franja horaria muy cargada de alumnos. En esa zona se ubican las Facultades de Económicas, Medicina, Odontología, Farmacia y una de las sedes de Sociales.

Para mañana, un sector de la conducción impulsa una movilización a la comisaría 19ª, ubicada en Charcas 2844. Asiner enfatizó: “Los estudiantes no nos dejaremos intimidar. Multiplicaremos la campaña de las facultades para denunciar este ataque y reclamar el fin de la zona liberada, que se terminen los secuestros y robos. Las autoridades de la UBA deben tomar cartas en el asunto”.

Informe: Gastón Godoy.

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El local, atacado el martes pasado a la noche, está ubicado en Uriburu y Paraguay.
Imagen: DyN
 
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