DEPORTES › RIVER SE IMPUSO POR 3-1 FRENTE A CHAPECOENSE EN EL MONUMENTAL

Goles para matar la anemia

Al equipo de Gallardo le costó más de lo esperado el partido, sobre todo después del empate de los brasileños. Pero en el momento justo aparecieron Pisculichi y otra vez Sánchez para despejar las dudas. La revancha, el próximo miércoles.

River ganó ayer su partido de ida por los cuartos de final de la Copa Sudamericana por 3-1 ante el desconocido Chapecoense, de Brasil –un equipo que pelea por no descender en el brasileirao–, pero a pesar de la ventaja, que será clave para la revancha, no dejó una imagen convincente. Sufrió buena parte del encuentro y debió apelar a los detellos de sus individualidades para compensar sus carencias colectivas, tanto en defensa como en ataque.

Sólo al principio la visita pareció dar todo tipo de ventajas. Eso permitía imaginar que para los dirigidos por Gallardo la victoria era cuestión de tiempo. Y a los 19 minutos Casco se despegó por la franja izquierda –su marcador, Gil, se enredó y se cayó solo– y llegó al fondo para, con todo el tiempo del mundo, meter un centro atrás que Sánchez tomó cerca de la medialuna y definió con un buen remate cruzado contra el palo derecho del arquero Danilo.

En desventaja, los brasileños parecieron despertarse y se adelantaron unos metros, aprovechando que River parecía entregar de a poco la iniciativa. En el mejor momento de los visitantes, el árbitro uruguayo Jonathan Fuentes no cobró una mano de Kranneviter dentro del área y, poco después, Cléber Santana no pudo rematar al arco desde la puerta del área.

Entre blooper y blooper, River se relajó. Pero cuando menos lo esperaba, un pase largo encontró mal parada a su defensa; Barbio cabeceó de espaldas y la pelota le quedó justita a Maranhao, quien encaró y definió entre las piernas de Barovero para poner el partido 1-1.

Fue duro el golpe para los millonarios que, más o menos rápidamente, entendieron que para dejar de parecerse al equipo del torneo local debían asumir nuevamente el protagonismo. Y lo hicieron. Sánchez metió el centro a los 57 y Pisculichi no llegó por poco para conectar. Fue un aviso. A los 62, Piscu metió un hermoso bombazo de tiro libre y puso otra vez a River en ventaja. Con ese envió, Sánchez, sobre el final, tras una buena jugada de Driusi, le puso cifras definitivas.


3- RIVER

Barovero; Mercado, Maidana, A.Balanta, Casco; C.Sánchez, Kranneviter, L.González; Pisculichi; Mora, Driussi.

DT: Marcelo Gallardo.

1- CHAPECOENSE

Danilo; Apodi, Vilson, Neto, Dener; Gil, Cléber Santana, Camilo, Barbio; Maranhao, De Melo.

DT: Guto Ferreira.

Estadio: Monumental.

Arbitro: Jonathan Fuentes (Uruguay).

Goles: 19m Sánchez (R), 36m Maranhao (CH); 63m Pisculichi (R), 85m Sánchez (R).

Cambios: 46m Ananias por Barbio (CH), 60m Viudez por L.González (R), 72m G.Martínez por Pisculichi (R), 73m T.Luis por Maranhao (CH), 83m Ponzio por Kranneviter (R).

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Sánchez fue la figura, con dos goles. Piscu metió un bombazo de tiro libre.
Imagen: Alejandro Leiva
 

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