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Un total de 20 allanamientos se realizaron en restaurantes y supermercados chinos de la Capital Federal y Gran Buenos Aires, en los que se detectaron alteraciones en las máquinas registradoras para evadir el pago de impuestos, según consignaron fuentes policiales. Personal de la División Jurídico-Contable de la Superintendencia de Investigaciones Federales de la Policía Federal realizó ayer por la mañana allanamientos simultáneos para desbaratar a los cerebros de la organización, quienes proveían a los comerciantes de los elementos para facturar “en negro”.
La investigación se inició por orden del Juzgado en lo Penal Tributario número 1, a cargo del doctor Javier López Biscayart, con el objeto de probar la adulteración de los controladores fiscales. Treinta brigadas de la Superintendencia de Investigaciones Federales, con la participación de personal de la AFIP, efectuaron los operativos en distintos barrios de la Capital Federal y de los partidos bonaerenses de San Martín, San Miguel, José C. Paz, Morón, La Plata y Lanús.
Las maniobras de evasión fueron instrumentada por una firma dedicada a la venta, mantenimiento, servicio técnico y reparación de las máquinas registradoras. Tras varios meses de investigaciones, se logró poner al descubierto a las firmas involucradas. El modus operandi de las firmas involucradas, con participación de ingenieros electrónicos y técnicos, se traducía en el borrado de la memoria fiscal, adulteración y supresión de la misma.