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El macrismo logró que el Bauen volviera a sus dueños

Hace dos años y medio, los trabajadores se organizaron para reabrir el Hotel Bauen, abandonado por sus propietarios. Ahora, la Legislatura porteña decidió desconocer a la cooperativa. Piden el veto de la decisión.

La Legislatura porteña aprobó ayer por la madrugada una ley impulsada por el macrismo que restituirá el Hotel Bauen –recuperado por sus trabajadores– a los ex propietarios. La cooperativa del Bauen rechazó la ley y observó que los ex dueños tienen numerosas deudas con el Estado y que se perderán 120 puestos de trabajo. Ante el repudio, fueron expulsados del recinto por la policía con gases lacrimógenos. Ayer gestionaban una reunión con el vicejefe de Gobierno, a cargo del Ejecutivo, Jorge Telerman. Le pedirán que vete la norma, que además condone parte de la deuda de los ex propietarios. “Se ve que el reloj de la Legislatura camina en sentido contrario. El Estado ya asistió a los dueños y el hotel terminó en la quiebra”, recordó el presidente de la cooperativa, Marcelo Ruarte.
El empresario Marcelo Iurcovich inauguró el hotel para el Mundial de 1978 con un crédito del Banade, que nunca canceló. Se estima que debe aún 13 millones de pesos. En 1997 lo vendió a Solari SA, que también contrajo deudas por Alumbrado, Barrido y Limpieza (ABL) por más de 5 millones y llevó el hotel a la quiebra en 2001. En 2003, veinte trabajadores lo ocuparon. Hoy trabajan en el Bauen 140 personas y el hotel, además de recuperar 160 habitaciones, se utiliza para eventos culturales. La entidad a la que se le entregaría la propiedad no es ni Solari SA, ni el grupo Iurcovich, sino una empresa fantasma (Mercotel SA), que estaría integrada por los familiares de Iurcovich. “Mercotel no puede acreditar la tenencia, ya que en el Registro de la Propiedad aparece Bauen SA (Iurcovich), que tampoco la recuperó, porque nunca pagó la caución de 4 millones de pesos ante el juzgado comercial 9 por la quiebra”, dijo la abogada del Bauen, Florencia Kravetz. La ley nada dice sobre quién pagará esta caución.
El legislador macrista Mario Morando impulsó la norma como contrapartida de otro proyecto del kirchnerista Diego Kravetz, que pedía la expropiación temporaria en favor de los trabajadores. “La expropiación definitiva requería 35 millones de pesos. No me metí porque me interesa el Bauen, sino porque me pareció una barbaridad gastar este dinero en favor de cien personas. ¿Qué les digo a los desocupados que no se animaron a romper una faja y ocupar un predio?”, dijo Morando a Página/12. La ley, que se aprobó con 29 votos, establece que en un plazo de 90 días se negociará un convenio entre la empresa y la cooperativa. Se creó una comisión de seguimiento, que estará integrada por siete legisladores de distintos bloques. A través del convenio, se les da a los ex dueños un “plan de facilidades” para que paguen lo que deben de ABL y condona las deudas desde 2003. Establece un subsidio para pagar los sueldos de los empleados por un año y se mantendría a los 20 trabajadores que pertenecían a Solari SA con estabilidad por tres años. Los otros 120 no tienen garantías de continuar.
La ley reconoce a la cooperativa las mejoras hechas al edificio por 150 mil pesos y le da seis meses a la empresa para pagarlos, aunque los trabajadores plantean que invirtieron cerca de un millón. “Esta ley es inviable. Además, la comisión de seguimiento estará integrada por el macrismo principalmente. Vamos de mal en peor”, comentó Ruarte, que ayer tuvo una reunión con el secretario de Producción porteño, Eduardo Epszteyn, para gestionar un encuentro con Telerman e intentar que vete la norma. Kravetz planteó que “es una ley inconstitucional, armada para la empresa. Vamos a denunciar esto, porque puede terminar con juicio político a los que la votaron”.

Informe: Werner Pertot.

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Los trabajadores calculan que se perderán 120 puestos de trabajo.
 
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