ESPECTáCULOS

Cuatro artistas sin estereotipos

Esta noche, en el auditorio de Belgrano 1732 y con la actuación de Lidia Borda, comienza una nueva edición del ciclo gratuito Los Viernes Música.

 Por Karina Micheletto

Son cuatro mujeres que transitan el tango y el folklore, cada una con un estilo distintivo que la aleja de los estereotipos de género. A Lidia Borda, Suna Rocha, María Volonté y Roxana Carabajal las une algo más que una cuestión de género, y durante todos los viernes de septiembre el público podrá descubrirlo en el ciclo Los Viernes Música, que tradicionalmente organiza Página/12, esta vez junto a la Dirección de Música de la Ciudad. El ciclo comienza hoy a las 20.30 con la actuación de Lidia Borda en la Sociedad de Distribuidores de Diarios, Revistas y Afines (Belgrano 1732) y continúa durante todo el mes, siempre con entrada gratuita.
Borda presentará una versión más íntima de los temas de su disco Tal vez será su voz, grabado junto a la orquesta El Arranque, sobre la base del piano de Diego Schissi. Y también nuevas versiones como la de Volver, un tango que Borda siente de absoluta actualidad, de la mano de exilios cruzados y de historias que le son cercanas, casi una rareza en su repertorio, poco poblado de los tangos “que sabemos todos”. “Siempre se puede encontrar una mirada nueva sobre los clásicos. También me interesan los nuevos autores que aporten una mirada actual, aunque es difícil encontrarlos, esa mirada hoy se volcó hacia otros géneros como el rock”, explica la cantante.
Además de los nuevos temas de su repertorio, Borda está preparando una gira por Europa para el año que viene, y aquí sí interviene la cuestión de género. Su hija más chica está por cumplir un año y Borda tuvo que esperar para reanudar los viajes que interrumpió con su primer embarazo. “Sigue siendo bastante duro para las mujeres trabajar y criar a sus hijos, aunque tengan toda la colaboración del mundo de la pareja. Un tipo que tiene un trabajo creativo se mete en una pieza y no sale en todo el día. Una mujer no lo puede hacer porque, por ejemplo, tiene que dar la teta”, ejemplifica. “Cuando tus hijos son chicos es difícil cumplir con una gira sin sentir culpa. Después comprobás que ellos se la bancan mejor que vos: cuando volvés no se cumple ninguna de tus fantasías, ni te dejan de hablar ni se enfermaron gravemente en tu ausencia.”
Para Suna Rocha, la condición de mujer impone otras trabas profesionales: “En todos los géneros y en el folklore en particular hay poco espacio para la mujer. Basta ver la lista de los artistas que participan en los festivales: todos hombres, y siempre los mismos”, asegura. La cordobesa que editó este año Maldición de Malinche se presentará en Los Viernes Música el próximo 10 de septiembre. En ese tema escasamente difundido de Gabino Palomares, la folklorista retoma la historia de la amante de Hernán Cortés que tradujo al español los planes defensivos aztecas y le permitió al conquistador apoderarse de Tenochtilán. Aquella mujer condenada por la traición fue Malinche, y la maldición a la que alude el título aún se aplica a la realidad latinoamericana. “Es un tema que canto con mucho gusto, sintiendo que estoy testimoniando un momento muy particular. Para eso sirven los cantores populares, para testimoniar”, dice Rocha.
María Volonté viajó a Estados Unidos para asistir a la entrega de los Grammy latinos, premio al que fue nominada en la categoría que finalmente ganó Gerardo Gandini (ver página 29). La nominación fue por el disco Fuimos, grabado con el pianista de jazz Horacio Larumbe, quien falleció un mes después de la presentación del disco. Aunque es más conocida como cantante de tangos, Volonté suele tener este tipo de acercamientos al jazz y también se anima a cantar folklore o boleros. “Siempre busqué encontrar mi propia voz, mi propia manera de relacionarme con el tango. En esa búsqueda no sólo hallé un modo propio de encontrarlo, desde ese lugar pude encontrar la apertura hacia otros géneros. Es lo de siempre en el arte: o hacés lo que se espera que tenés que hacer o todos los días de tu vida te estás tirando de un trampolín”, define Volonté. “Por suerte en la Argentina algo está cambiando, nos estamos convirtiendo en un pueblo capaz de dejarse expresar por muchas voces al mismo tiempo, que es lo que hace tan rica la música de jazz o del Brasil, por ejemplo. Ellos no se ponen a pensar si la versión de Caetano del tema de Jobim es mejor o peor que la de Gal Costa o Carlinhos Brown. No importa, se disponen a la escucha”, compara Volonté.
Roxana Carabajal, la encargada de cerrar el ciclo el viernes 24 de este mes, tiene un punto de vista similar: “Cada una de las cantantes de este ciclo tenemos nuestro estilo propio, en base a nuestras historias de vida. De eso se trata la música popular: son vivencias expresadas como cada uno puede y necesita expresarlas, lo que a uno le nace cantar en cada momento de su vida”, explica la cantante cuyo apellido es sinónimo de chacarera. “En mi caso particular, lo que quiero entregar como cantora y la esencia de mi estilo está en mi familia, en Peteco, en mi papi (Carlos Carbajal, el autor de Entre a mi pago sin golpear, que en realidad es su abuelo). Ellos son mis referentes. Y Mercedes Sosa, a quien admiro desde siempre.”

Compartir: 

Twitter

Roxana Carabajal, Suna Rocha y Borda, tres de las participantes.
 
ESPECTáCULOS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.