SOCIEDAD › MURIERON DOS OFICIALES DE LA PREFECTURA NAVAL

Caída fatal de un helicóptero

La aeronave recién salía de mantenimiento y los dos tripulantes eran hombres muy experimentados. Por eso, hasta anoche era imposible conocer la causa del accidente. La Justicia pidió pericias para saber cuáles fueron las fallas del aparato.

“Las condiciones meteorológicas eran óptimas, los tripulantes tenían 5000 horas de vuelo cada uno y la aeronave recién salía de mantenimiento. No es fácil pensar qué pudo haber pasado”, admitió ayer con desconcierto, en declaraciones a Página/12, el prefecto mayor Pedro Mele, jefe del servicio de Aviación de la Prefectura. Se refería a la caída del helicóptero de la Prefectura Naval, que se precipitó a tierra ayer en el aeropuerto de la base aérea de San Fernando: el piloto y el copiloto murieron inmediatamente por el fuerte impacto. Hasta el momento, se desconocen las causas que provocaron el accidente: la Justicia de San Isidro está realizando las pericias necesarias para determinar el origen de las fallas. El helicóptero era un Schweizer 300 C. Según Mele, “como es una aeronave liviana y sin muchas complicaciones, generalmente es la que se usa para realizar entrenamientos con los pilotos que recién se inician”. No era ése el perfil de las víctimas: el prefecto Marcelo Guillermo Dreher (comandante de la Unidad, instructor de la escuadrilla y piloto del PA-42) y el subprefecto Carlos Sebastián Curcio (jefe de Mantenimiento y copiloto), tenían entre los dos más de 10.000 horas de vuelo en su haber. Además, Dreher tenía 14 años de servicio y Curcio más de 5. “Eran hombres de mucha experiencia en el aire”, destacó Mele.

En general, los helicópteros Schweizer 300 C están asignados a tareas en el norte del país, en funciones policiales de lucha contra el contrabando y de rescate. El que se precipitó ayer a la tarde había sido traído de la provincia de Corrientes para una inspección periódica.

“Desde las 25 horas de vuelo, a todas las aeronaves se les debe hacer tareas de mantenimiento y mientras más vuelos tienen más ítems se les revisan”, explicó a este diario el prefecto Mele. El oficial manifestó que “son incalculables las inspecciones que hemos hecho, son aeronaves muy simples, de muy poco porte. Este helicóptero tenía 2600 horas de uso y el piloto era instructor”.

Diez minutos después del despegue, el PA-42 cayó sobre una de las pistas del aeropuerto que la Prefectura tiene en San Fernando. Ayer, “comenzaba los vuelos de prueba”, sostuvo Mele. “Tengo 35 años de servicio en la Prefectura, volé durante 30 años, siempre salí con la máxima seguridad y la prioridad es que las aeronaves estén en perfectas condiciones”, manifestó .

Tras afirmar que por el momento no se pueden determinar las causas del accidente, dijo que “llamó la atención que la máquina cayó de costado y desde una altura considerable”. “La nave estaba en perfectas condiciones y antes del vuelo se habían hecho todas las pruebas en tierra que corresponden”, aseguró. Tampoco, “hubo una situación atípica que nos alertara sobre la posibilidad de un accidente”. En la fuerza “hay otros cinco helicópteros de estas características, actualmente afectados a la búsqueda de los desaparecidos durante la competencia de nado en Misiones”.

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El campo de la base aérea de San Fernando, donde ayer cayó el helicóptero.
Imagen: Télam
 
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