Inspectores de Aduana de la frontera de Salta con Bolivia detuvieron en la localidad de Aguas Blancas la marcha de un Peugeot 504 en cuyo interior habían ocultado 62 kilos de cocaína. El vehículo era conducido por un joven de 22 años que vive en la capital salteña. El hecho tuvo lugar en el puente internacional que une los dos países. El joven sostuvo que volvía de Bolivia, donde había permanecido cuatro días realizando compras. El relato, por algún motivo, no les cerró y comenzaron a analizar el auto. Primero revisaron el tanque de combustible y los zócalos, sin encontrar ningún elemento sospechoso, pero luego los agentes observaron que el grosor del interior del techo no era normal. Lo revisaron con un equipo de rayos X y lograron detectar una serie de formas similares a las que habitualmente tienen los paquetes de cocaína. Después, comprobaron que el techo tenía una chapa metálica no habitual. Con una amoladora y herramientas cortantes, abrieron el techo como una lata de sardinas y dentro encontraron 70 paquetes con 62 kilos de cocaína de máxima pureza valuada en 1.350.000 pesos. El joven fue detenido.