Fuentes policiales informaron que el hecho comenzó alrededor de las 10.10 en la sucursal bancaria situada en la avenida Hipólito Yrigoyen 797 (Ruta 197), a tan sólo media cuadra de la seccional 3ra. de Tigre.

Los investigadores están convencidos de que se trató de una "entrega" por la modalidad del robo, ya que duró sólo unos minutos, el delincuente conocía perfectamente algunos datos y todos los movimientos del banco.

Según las fuentes, todo comenzó cuando el falso policía entró al banco, encaró al vigilador privado y le dijo: "Vengo a ver a Marilyn por el control bancario". Marilyn es el nombre de pila de la mujer policía que custodiaba la entidad desde el bunker y el control bancario es un chequeo policial de rutina.

El vigilador entonces condujo al ladrón vestido de policía hasta la puerta que divide el sector público y de cajas de la sucursal, con las oficinas de los gerentes y el tesoro.

"El empleado de seguridad fue muy ingenuo y tipeó la clave necesaria para la apertura de la puerta y lo dejó pasar", dijo un jefe policial. Ya en el sector restringido del banco, el ladrón uniformado se dirigió al bunker donde estaba la mujer policía y le dijo que venía a hacer un control.

"La mujer policía también actuó de manera ingenua porque dice que son pocos y conocidos los policías que suelen hacer este tipo de controles en los bancos. Ella dice que no le prestó atención a la cara y le abrió el bunker", explicó la misma fuente.

El falso efectivo extrajo una pistola, encañonó a la verdadera policía, la desarmó, apagó las luces del bunker y allí se quedó parapetado con su rehén hasta que vio pasar al tesorero.

Según el comisario inspector Sergio Rodríguez, jefe de la Policía Distrital de Tigre, el delincuente permaneció con la mujer como rehén durante 45 minutos, lapso en el que aprovechó para quitarle su pistola 9 milímetros y un teléfono celular.

Cuando el ladrón vio pasar al tesorero, salió del bunker con una pistola en cada mano. "Con una apuntaba a el hombre y con la otra a la policía", relató uno de los investigadores.

Así el delincuente obligó al empleado jerárquico del banco a abrirle el tesoro, donde ingresó con los dos rehenes, les entregó un bolso vacío y los obligó a llenarlo con los fajos de billetes.

Si bien hasta esta tarde no se había realizado el arqueo, el tesorero le dijo a la Policía que estimaba en 350.000 pesos la suma que se llevó el ladrón.

Con el botín en su poder, el asaltante realizó todo el camino inverso y salió caminando por la puerta del banco sin que nadie se diera cuenta de que acaba de robar el tesoro.

"Serían las 11.15 cuando yo lo vi salir. En el momento en el que yo lo veo pasar, lo hizo tranquilamente como cualquier cliente del banco, despacio, sin apuro y no llamó mucho la atención" dijo una clienta que estaba dentro del banco.

La mujer aseguró que "las personas que estaban en la caja lo vieron salir del tesoro apurado, incluso empujó a una señora". "Al rato que se fue, cerraron el banco. No sabíamos por qué, ni qué había pasado y de repente viene un empleado del banco y dice que se robaron el tesoro", relató la testigo.

"Ahí fue cuando todas las personas empezaron a tomar el detalle de esta persona vestida de policía", concluyó. Rodríguez explicó que como al momento en que se descubrió el robo había muchos clientes, concurrió a la entidad una ambulancia que los asistió porque algunos estaban muy nerviosos al enterarse de lo ocurrido.

El caso es investigado por la comisaría 3ra. de General Pacheco, la jefatura Distrital Tigre, la Departamental Conurbano Norte y la Subdelegación de Investigaciones de Tigre.