El Mundial de clubes de la FIFA tiene nuevo sponsor y se llama Alibaba. Un nombre hecho a medida del escándalo global y que no anticipa el día de los inocentes. Es real. El gigante chino del comercio electrónico acordó que patrocinará el torneo desde hoy y hasta 2022 y reemplazará a Toyota. Su objetivo es promocionar una marca automovilística: Alibaba EAuto, un coche que pretende lanzar al mercado en 2016 y que funcionará conectado a Internet. Como era de esperar, se volvieron virales en las redes sociales todo tipo de cargadas por esta nueva sociedad. Completa la información un dato que no puede considerarse menor: uno de los equipos que interviene en esta edición del torneo, el chino Guangzhou Evergrande, es propiedad del grupo Alibaba, que tiene el 50 por ciento de sus acciones.

El próximo domingo jugará con América de México por los cuartos de final.

En la presentación del acuerdo el director de marketing de la FIFA, Thierry Weil, reconoció que su federación, carcomida por la corrupción, tiene “dificultades” para conseguir sponsors. No fue el caso de Alibaba, un consorcio privado con sede en Hangzhou dedicado al comercio en Internet que ha vendido productos por sumas que superan a sus dos principales competidores juntos: eBay y Amazon.com.

Su fundador y presidente es Jack Ma, un chino visionario de 51 años, de muy baja estatura y cuyo lema es “Cuando eres pequeño debes enfocarte y utilizar tu cerebro y no tu fuerza”. El emporio virtual que maneja se llama como el personaje del cuento de Las mil y una noches “porque es fácil de pronunciar y reconocido mundialmente”, dice. En 2013, su compañía fue visitada por 231 millones de compradores. Ese mismo año, sus ventas llegaron a 7500 millones de dólares. Estas son algunas de las cifras del nuevo socio presentador –así figura en la página web del certamen– que tiene el Mundial de Clubes. Otros sponsors oficiales de la FIFA que patrocinan el evento son Adidas, Visa, Coca Cola y el gigante de la energía ruso, Gazprom.

Weil dijo en la conferencia de prensa que se realizó en Tokio y donde se difundió el acuerdo con Alibaba que “China es un mercado en el que aún no somos fuertes” y repitió un viejo compromiso de la FIFA para con ese país, a esta altura una perogrullada: “Queremos ayudar a desarrollar su fútbol”. También deslizó la posibilidad de que organice alguna Copa Mundial en el futuro.

El nuevo sponsor se alió con la FIFA para tener como vidriera el Mundial de Clubes y comercializar su automóvil que está fabricando en sociedad con la Corporación Industrial Automovilística de Shanghai (SAIC). El lema con que se sumará al torneo hasta 2022 dirá, en inglés, “Copa Mundial de Clubes de la FIFA presentada por Alibaba E-Auto”. Daniel Zhang, el consejero delegado del grupo que compartió la presentación con el francés Weil, comentó: “Esto es una parte importante de la estrategia de globalización de Alibaba Group destinada a conectar China con el mundo entero”.

Más específico, el empresario dijo que “en el deporte confluyen varios de los temas estratégicos que está abordando el grupo Alibaba, como la salud y el bienestar, y estamos deseando añadir valor adicional, para los consumidores y el sector deportivo, con tecnología basada en los datos en línea”. Esta sinergia les abre perspectivas redituables a ambos socios. A la FIFA desacreditada porque necesita rápido conseguir auspiciantes y al gigante chino porque el fútbol es un arma de penetración comercial sin techo.

Un dato insoslayable de esta operación cuyas cifras no trascendieron es que Alibaba posee el 50 por ciento de las acciones del club chino Guangzhou Evergrande, que compró el año pasado. Es el bicampeón de la Liga de Clubes de Asia y participante en la presente edición del Mundial que ya está disputándose en Yokohama y Osaka. Lo tiene en sociedad con un magnate inmobiliario llamado Xu Jiayin, presidente del grupo cantonés Evergrande, quien es el dueño de la otra mitad.

Al equipo lo dirige el brasileño Luiz Felipe Scolari y su jugador más destacado es su compatriota Robinho. En los cuartos de final que se disputarán este domingo jugará contra América de México. Por esa llave va el Barcelona de España, favorito a ganar el Mundial y que espera por el vencedor del partido.