Tras su frustrado intento de fines del año pasado, el titular de Belgrano de Córdoba, Armando Pérez, adelantó ayer que se anota como candidato a presidir la AFA y dio por seguro que esta vez logrará sumar los avales necesario para presentar su postulación.

“Se abre una nueva instancia”, prologó Pérez al anunciar que quiere participar de “forma democrática” de la elección para el futuro gobernante del fútbol. Pérez juntó unos pocos avales y no llegó a los siete necesarios para presentar candidatura en lo que fue la bochornosa elección de la Asamblea del 3 de diciembre. “Voy a conseguir los avales”, prometió Pérez de cara al próximo 29 de junio.

Con una dirigencia groggy tras aquella escandalosa noche del predio de Ezeiza, el Gobierno propuso a Pérez para encabezar la AFA, pero tanto el sector oficialista de Luis Segura como el que responde a Marcelo Tinelli rechazaron la recomendación.

Para lo que se viene, Pérez avaló que se presenten otros dirigentes como forma de enriquecer el debate democrático. El dirigente cordobés, dueño de la empresa de cosméticos TSU, fue el dirigente que levantó la quiebra de Belgrano el mismo 2011 que mandó al descenso a River. Es el bagaje que le levanta las acciones.

Pérez había sido propuesto en su momento por Daniel Angelici, el presidente de Boca que con el correr de las semanas ganó poder, desde el influyente sitial de secretario general. Tras el encuentro del martes por la mañana con el secretario general de la Presidencia, Fernando De Andreis, y Fernando Marín, a cargo de Fútbol para Todos, la dirigencia de la AFA se comprometió a que los cheques tendrán que salir con las firmas de Angelici o de Matías Lammens, el nuevo tesorero y con fecha del día.

El visto bueno del Gobierno deja también en claro que Luis Segura, quien estuvo en ese encuentro, al igual que Hugo Moyano, de Independiente, ya transita sus últimos seis meses como presidente afista.

Angelici ya avisó que no se presentará a la elección de junio, pese a que la directiva lo veía como el gran interlocutor con el gobierno de Mauricio Macri, quien antes del ballottage se había pronunciado en contra de Segura.

En cambio, así como se lanzó ayer Pérez también Nicolás Russo, titular de Lanús, apunta a consolidarse como una alternativa, luego de la experiencia política que tuvo en su pago chico como postulante del massista Frente Renovador.

Por lo pronto, la cúpula del gobierno de transición en la AFA ya tiene el reglamento de juego que impuso el nuevo gobierno, de imponerle a los clubes cuidado en los gastos y sanciones a clubes que mantienen deudas, consistentes en impedirles sumar refuerzos.