La empresa Telefónica rechazó el proyecto Argentina Digital, que declara como servicio público las comunicaciones TIC entre operadores. “No es el proyecto que más se ajusta, el más adecuado para que el país evolucione en esta industria. No es un proyecto que aliente las inversiones. Desearíamos un proyecto de ley que fije claramente la política regulatoria, sin delegación de facultades. Nuestra valoración no es positiva”, sostuvo el secretario general corporativo de la española, Alejandro Pinedo. Más allá de que la iniciativa les permitirá a Telecom y Telefónica ofrecer servicios de comunicaciones audiovisuales, también las obligará a que abran sus redes para que otros jugadores, ya sean pequeñas cooperativas o pymes telefónicas o cableoperadores, puedan competir en igualdad de condiciones. En este punto radica la principal objeción de las telcos. En representación de Cablevisión estuvo presente Carlos Moltini, quien argumentó que “los cableoperadores van a desaparecer”.

La norma bajo análisis no es una carta en blanco para las telefónicas, como explicitaron ayer los senadores Gerardo Morales (UCR) o Rubén Giustiniani (PS). La propuesta introduce en su primer artículo el concepto de neutralidad de la red, que incluso tendrá una corrección para clarificar mejor su alcance. El presidente global de Telefónica, Cesar Alierta, sostuvo hace dos meses que “el concepto de neutralidad de la red fue inventado por los que no tienen red propia”. Es decir, las telefónicas defienden la idea de la convergencia, pero solamente si pueden conservar su posición dominante.

La declaración de servicio público para las comunicaciones TIC entre operadores le permitirá al Estado regular el acceso de las cooperativas y pymes del sector a la infraestructura ya montada por las telefónicas y los grandes cableoperadores. Si bien el decreto 764 del 2000 fijaba pautas concretas para la interconexión, Telecom y Telefónica llevaron adelante sus propias reglas de juego, sin el control suficiente del Estado, en detrimento de las pymes y cooperativas.

El presidente de la Asociación Santafesina de Televisión por Cable, Héctor Delloni, narró una serie de casos en los que las telcos llegaron a cobrarles a las pymes más de 1000 dólares el mega de conexión, sumado a las dilaciones para la interconexión con las redes troncales. Delloni sostuvo la necesidad de mejorar la redacción del proyecto para proteger a los pequeños jugadores del sector, algo que tiene bastante consenso dentro del FpV.

Una de las precisiones que se estaban barajando para el momento de la reglamentación, que podría ser incluida directamente en el proyecto de ley, es una segmentación clara de cuánto debería pagar cada jugador por la interconexión. A modo de ejemplo, el esquema podría ser que si Telefónica le paga 100 pesos a Cablevisión para ingresar a su red, ésta debería pagar 150 pesos para ingresar en la red de una cooperativa, mientras que los pequeños jugadores deberían abonar 50 pesos para poder acceder a la red.

La senadora Norma Morandini invitó como expositor a Alejandro Fargosi, ex integrante del Consejo de la Magistratura y ex empleado de Telefónica y Cablevisión. Fargosi comenzó su actividad profesional en el estudio de su padre, Fargosi y Asociados, en 1987 pasó a trabajar como asesor legal de ENTel y, luego de la privatización menemista, fue nombrado director del área de asesoría legal de Telefónica.

“Esta ley va a ser corrupción pura”, lanzó Fargosi al comienzo de sus diez minutos de alocución. “Será la estructura legal y reglamentaria que prohíja la corrupción. Las leyes en blanco hacen eso. Habría que tirarla y empezar de nuevo”, sostuvo el abogado, que suele alternar su tarea de lobby entre Telefónica y Cablevisión. No bien finalizó su discurso, criticado por el formoseño José Mayans, se acercó a los senadores Mario Cimadevilla (UCR) y Diego Santilli, con quienes intercambió algunas risas. “Vine solamente por vos, sabía que me iba a divertir”, le manifestó entre carcajadas Cimadevilla a Fargosi.

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