EL MUNDO › UNO DE LOS TRES NARCOS MáS BUSCADOS DE COLOMBIA

Lo mataron a “Cuchillo”

El ex paramilitar Pedro Oliveiro Guerrero, alias “Cuchillo”, habría muerto ahogado en medio de un operativo lanzado por la policía colombiana durante los festejos de Navidad.

El presidente Juan Manuel Santos anunció ayer la caída de uno de los tres jefes narcos más buscados de Colombia. El ex paramilitar Pedro Oliveiro Guerrero, alias “Cuchillo”, habría muerto ahogado en medio de un operativo lanzado por la policía colombiana durante los festejos de Navidad. El mandatario lo definió como un asesino de asesinos.

El presidente colombiano felicitó ayer a las fuerzas públicas por la muerte de Guerrero, sobre quien dijo que se había convertido en una especie de leyenda. “Cayó el asesino de asesinos. Este bandido que llevaba un largo historial de criminalidad en todas sus fases tenía más de quince órdenes de captura y se le atribuyen más de tres mil muertes”, declaró el titular de la Casa de Nariño. Según explicó Santos en rueda de prensa, Guerrero estaba refugiado en el área rural del municipio de Mapiripán, en el departamento de Meta, a unos 400 kilómetros de Bogotá. El campamento fue asaltado por aire y por tierra por un comando policial, cuando “Cuchillo” estaba por celebrar la noche de Navidad. Durante la acción, murió uno de los escoltas de Guerrero y fueron capturados otros siete. Entre los detenidos está su hombre de confianza, Harol Rojas.

“Guerrero logró escabullirse pero la operación estaba prevista. Si se lograba escabullir, iba a haber un cerco, que funcionó en forma muy eficaz. Se fue buscando piedra sobre piedra y finalmente se halló a este individuo en la tarde de este martes”, precisó Santos. El Instituto de Medicina Legal investiga las causas de la muerte del narco-paramilitar, ya que en su cuerpo no se encontraron impactos de arma de fuego, ni elementos cortopunzantes. En realidad, los peritos están tratando de dilucidar si el ex paramilitar sufrió una falla cardíaca o murió ahogado, dado que su cadáver habría aparecido cerca de un arroyo.

“Esta es una muy buena forma de terminar un año, que ha sido fructífero para la policía y las fuerzas armadas. Este es el golpe más fuerte a las bandas criminales”, celebró el sucesor de Alvaro Uribe. De acuerdo con lo que informó el presidente colombiano, a Guerrero se le habrían encontrado dos pistolas, una de ellas enchapada en oro y diamante, y un cuchillo, que habría usado para degollar a muchas de sus víctimas, como recalcaron desde la Casa de Nariño. El director de la Policía de Colombia, Oscar Naranjo, afirmó: “La pistola representa la opulencia del crimen trasnacional”. Según el jefe policial, el arma sería un regalo de los carteles mexicanos a otro de los jefes narcos de la región, Héctor Germán Buitrago, más conocido como “Martín Llanos”. Naranjo dijo que “Cuchillo” le habría robado la pistola a Buitrago, después de un enfrentamiento entre sus bandas.

Desde la Casa de Nariño, lamentaron la muerte de dos agentes policiales en la operación contra quien fuera jefe de la banda de ultraderecha Ejército Revolucionario Popular Antiterrorista de Colombia (Erpac), que aglutina a más de mil combatientes. Esa organización fue fundada por Guerrero después de que se desmovilizara en 2006 el grupo paramilitar Frente Héroes del Guaviare del Bloque Centauros que dirigía, tras un acuerdo con el gobierno colombiano. Desde entonces, Guerrero estuvo prófugo y se convirtió en uno de los líderes narcos más buscados del país. “Cuchillo” junto con Daniel Barrera (alias el “Loco Barrera”) y Luis Enrique Calle Serna (alias “Comba”) estaban en la lista para ser extraditados a Estados Unidos. Por Guerrero, el gobierno colombiano había prometido una recompensa de 2,6 millones de dólares y era el capo narco más poderoso de los tres, según explicó a Página/12 Jorge Restrepo, director del Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (Cerac). “Es muy importante su caída porque ‘Cuchillo’ era el que había logrado consolidar un ejército parecido a los paramilitares de antaño”, añadió el especialista.

El analista negó que el mapa del tráfico de drogas en Colombia vaya a alterarse por la muerte de “Cuchillo”, aunque sí advirtió sobre un posible resurgimiento de la violencia en las zonas que controlaba. “Probablemente vendrá una serie de vendettas para apropiarse de lo que Guerrero había logrado acumular. Se rompió ese control monolítico”, dijo Restrepo a este diario. Según el investigador, el poder que cosechó Guerrero se debió a que el acuerdo entre el gobierno colombiano y los grupos paramilitares estuvo mal diseñado y nunca se logró un desarme efectivo. Restrepo también apuntó que, en los últimos años, se avanzó en materia de verdad pero que aún no hay ninguna sentencia firme para los criminales paramilitares.

Informe: Luciana Bertoia.

Compartir: 

Twitter

“Cayó el asesino de asesinos”, dijo Santos.
Imagen: EFE
 
EL MUNDO
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.