La apuesta de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner para las elecciones de octubre “es llegar al cuarenta por ciento de los votos”, léase diez puntos menos de los obtenidos en las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias. La elección, pese a los 38 puntos de diferencia en agosto, se va a definir recién “en los últimos quince días”. Las originales reflexiones pertenecen al candidato presidencial por el Frente Popular, Eduardo Duhalde, quien invocó su temor a “una especie de enfrentamiento” para justificar la suspensión del acto en el que iba a ser escrachado por los asesinatos de los militantes Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, y apuntó contra su ex compañero y ahora rival de Compromiso Federal, Alberto Rodríguez Saá, al asegurar que “hay candidatos que se entregan, sopla un vientito y empiezan a acordar con el Gobierno”.

Duhalde aseguró que en su espacio retomaron el trabajo de “organización y control” de la elección del 23 de octubre y destacó la importancia de la fiscalización del comicio “en todo el territorio”. Sobre el resultado obtenido por la Presidenta en las primarias, el ex gobernador bonaerense se mostró “seguro que no es el 50 por ciento, es mucho menor”, en alusión a supuestas irregularidades en el conteo que según Duhalde le habrían dado al oficialismo una ventaja mayor a la real. “Pero de todas maneras ha quedado claramente como primera”, admitió .

En ese contexto, el dirigente de Lomas de Zamora aseguró que “toda la apuesta del Gobierno es llegar al 40 por ciento”, léase diez puntos menos de los obtenidos en las primarias, porque “en todos los distritos donde se controló estuvieron lejos de eso”, dijo, y ejemplificó con “Capital, Córdoba y Santa Fe”.

Consultado sobre la suspensión de un acto de campaña en Avellaneda, el viernes, ante el anuncio de un escrache por parte de familiares y amigos de Kosteki y Santillán, los militantes asesinados por la policía bonaerense durante su interinato presidencial en 2002, aseguró que “tenía miedo de una especie de enfrentamiento” entre “grupos de chicos jóvenes que se juntan para hacer una especie de batucada” y fiscales de su sector que iban a participar del acto.

No obstante, Duhalde anticipó que estaría ayer en La Matanza “con el mismo propósito” destinado a fortalecer la fiscalización de la elección, y que continuará el recorrido por distintas provincias del interior para “asegurar el control” del comicio nacional.

La elección “se va a definir en los últimos 15 días”, aseguró y contrastó su actitud con la de “candidatos a presidente que ya se entregan, sopla un vientito y los arrincona y empiezan a acordar con el Gobierno”, en referencia a Rodríguez Saá. “Hay quienes no hacemos eso”, se diferenció.