Una joven de 23 años denunció que fue violada en las inmediaciones de la estación Rivadavia, en el barrio porteño de Núñez, cuando salía del trabajo. La policía interviene en el hecho de oficio porque la víctima fue atendida en el Hospital Pirovano, pero tanto fuentes judiciales como policiales indicaron que no se había formalizado la denuncia.

Fuentes policiales informaron que el hecho ocurrió el lunes pasado por la noche en el cruce de las calles Pico y Grecia, a una cuadra de la estación Rivadavia del ex ferrocarril Mitre. Según lo que contó la propia víctima, que tiene domicilio en provincia de Buenos Aires, fue interceptada y violada a la salida de su trabajo en plena vía pública. El titular de la asociación Enlace Vecinal Núñez, Alberto Yeannes, aseguró que “la chica trabaja en Pico y Libertador en un instituto y de lunes a viernes, cuando sale, se dirige a lo de los abuelos en Villa Urquiza porque ella vive en el Gran Buenos Aires”. Según Yeannes, cuando la víctima se dirigía “a tomar un medio de transporte para ir a lo de sus abuelos, se le acercó un hombre de aproximadamente 30 años, bien vestido y le dijo que había dos personas que le querían robar y que él la iba a acompañar”.

“Le dijo que iba a hacer de ángel guardián y en realidad era una bestia que la violó en el terraplén”, agregó el dirigente vecinal. Sin embargo, un jefe policial aclaró a que “aparentemente no es un caso típico de un abusador que eligió su víctima al azar, sino que el propio padre de la joven ya contó que el supuesto violador conocía a su hija”.

“Estamos esperando que la chica se presente a realizar formalmente la denuncia y aclare esta situación”, agregó la fuente policial consultada.

La joven fue asistida el mismo lunes por la noche en el Hospital Pirovano, donde le practicaron los hisopados para tratar de extraer muestras de perfil genético del violador y tratamientos de rigor para estos casos.